Ha sido uno de los arqueros colombianos con mayor reconocimiento a nivel internacional. Su primera experiencia fuera del país fue en Paraguay y a pesar de jugar pocos meses vivió un gran momento. Ser figura en una definición por penales siempre será importante para un guardameta.

Faryd Mondragón debutó en el Deportivo Cali y para que sumara más partidos el club lo mandó a préstamo a Sporting de Barranquilla, Real Cartagena e Independiente Santa Fe.

Con los capitalinos no tuvo muchas oportunidades en el segundo semestre de 1992, aunque Jorge Luis Pinto lo quería mantener para la temporada 1993. El guardameta tenía 21 años y buscaba más oportunidades por lo que empezó a hablarse de su posible traspaso al exterior.

A comienzo de 1993 el ‘turco’ recibió una llamada de Carlos Arcesio Paz, presidente del Cali, a decirle que se iba a Cerro Porteño de Paraguay. Al parecer hubo una recomendación de Jorge Amado Nunes y Gustavo Sotelo, jugadores que fueron compañeros de Mondragón en el club ‘azucarero’.

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“Cuando me propusieron lo de Cerro, lo pensé mucho. Ir a otro país, solo, dejando a un lado mi familia, es un pensamiento duro. Pero la vida exige esa clase de sacrificios”, dijo meses después en una entrevista a El Tiempo.

En aquel momento los equipos del mismo país compartían grupo en la Copa Libertadores. Cerro Porteño y Olimpia se enfrentaron junto a River Plate y Newell’s Old Boys. En el Defensores del Chaco hubo empate sin goles en el primer partido y Mondragón fue figura, mientras que en el segundo se impuso Olimpia 1–0. Al final ambos terminaron clasificando a los octavos de final. Cerro eliminó a Cobreloa y Olimpia a Nacional de Uruguay.

El Clásico Paraguayo se volvería a vivir en los cuartos de final. La rivalidad tiene más de 100 años e incluso hay alguna discusión sobre el resultado del primer partido en 1913. De un lado se dice que Cerro Porteño ganó 3–1 y otras fuentes aseguran que hubo empate a 2 goles. La ida en la Copa Libertadores quedó 1–1 y en la vuelta empate a un gol por lo que todo debió definirse desde el punto penal.

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Mondragón acertó el primer cobro con gran calidad. En el arco de Olimpia estaba Sergio Goycochea, el antipenal del Mundial de Italia 1990, y le atajó el tercer remate a Dida. Sin embargo, Luis Alberto Monzón la estrelló en el palo y luego el colombiano le atajó a Silvio Suárez. Blas Cristaldo le dio el triunfo a Cerro Porteño y la clasificación a la semifinal. El joven guardameta se ganó todos los elogios y el cariño de los hinchas de ‘El Ciclón’.

Solo un mes después el arquero debió despedirse de Cerro Porteño en medio de una polémica por una deuda telefónica del hotel donde se quedaba. Fueron pocos meses en Paraguay, pero constantemente se acuerda de su paso como en 2011 cuando publicó en redes sociales: “Celebra ‘la mitad mas uno de Paraguay’ grande Cerro. Que linda que está ‘La Olla Azulgrana’ que lindos recuerdos que tengo de Cerro Porteño!”.