Egan Bernal y su familia están atravesando horas difíciles, luego de que muriera por envenenamiento su perro Yako. El ciclista colombiano confirmó la triste noticia en su cuenta de Instagram, con un sentido mensaje en el que recordó lo mejor de su mascota y también lamentó que haya personas capaces de matar de esa forma a un animal.
El corredor del equipo Ineos señaló que su hermano menor fue quien adoptó al perro, hace menos de un año. Ese corto tiempo que convivieron bastó para que la mascota se convirtiera en un integrante fundamental de la familia de Bernal.
“Era el niño rebelde, el que rompía todo y nunca estaba quieto. Pero era nuestro Yako, molestaba siempre a mis otros bebés, le hacía compañía a mi mamá. Era el típico perro que cuando estaba se hacía sentir, ahora tal vez sin quererlo va a hacer sentir su ausencia, intentaba ser el alfa, protegía a mi familia. A su familia…“, recordó con nostalgia el deportista.
Egan indicó que Yako murió en los brazos de su hermano menor y que su mascota no fue la única víctima del envenenamiento, ya que una perrita también falleció por la misma causa.
“Era un ser importante para nosotros y no es justo… De verdad que no es justo que haya gente que sea capaz de envenenar a un animalito y hacerlo sufrir de tal manera”, agregó Bernal en la publicación con la que habló del fallecimiento de Yako.
Bernal compartió un carrusel de fotos de él y varios integrantes de su familia junto al perro, en momentos importantes que vivieron durante el último año. Como era de esperarse, el ciclista recibió numerosos mensajes de apoyo y solidaridad.
El fallecimiento de Yako contrasta con la felicidad que albergaba a Egan y su madre por el paseo que compartieron por Europa la semana pasada. No está claro si ellos siguen en el viejo continente o si ya se encuentran en Zipaquirá. Así fue como el campeón del Giro de Italia confirmó que su perro murió envenenado:
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