En la transmisión oficial del partido entre Brasil y Argentina, por las Eliminatorias sudamericanas rumbo a Catar 2022, las cámaras captaron algunos apartes del diálogo entre Lionel Messi, Neymar, Tite, Lionel Scaloni y Juninho Paulista, exfutbolista y coordinador de la selección ‘Canarinha’.

Aunque la mayor parte del diálogo quedó inentendible, una frase de Lionel Messi fue clara: “Hace tres días estamos acá. Es una vergüenza, estaban esperando que empiece el partido para entrar y frenarlo. ¿Para qué nos hacen jugar? Nos está mirando el mundo”, expresó el 10 de la ‘Albiceleste’.

Por su parte, Lionel Scaloni, entrenador de Argentina, preguntó en reiteradas ocasiones a los presentes por qué no los fueron a buscar en el hotel.

Sin embargo, Juninho Paulista le contestó que ellos sabían cuáles eran las condiciones para poder entrar al país.

Luego, ante la prensa, Scaloni expresó: “Entraron diciendo que se los querían llevar, a deportar. El delegado de Conmebol nos pidió que nos fuéramos para el vestuario. Los jugadores de Argentina y de Brasil les pidieron que nos dejaran jugar”.

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Por su parte, Claudio ‘Chiqui’ Tapia, presidente de la AFA, indicó: “No se puede hablar de ninguna mentira porque hay una legislación que se está cumpliendo y que todos los países aceptan. Vamos a regresar a Argentina. Vamos a adelantar el chárter”.

Desde Brasil se informa que la Asociación de Fútbol de Argentina (AFA) mintió sobre los papeles de ingreso al país de 4 futbolistas, quienes juegan en Inglaterra. Se trata de Emiliano Martínez y Emiliano Buendía (Aston Villa), así como Cristian Romero y Giovani Lo Celso (Tottenham).

Estos futbolistas, en teoría, no podían jugar el partido porque las autoridades sanitarias de ese país tienen una medida para prevenir la propagación del COVID-19, la cual dispone que las personas que provengan de Gran Bretaña, Sudáfrica y la India o hayan estado en los últimos 14 días en esos países, deben cumplir un aislamiento preventivo de 14 días al ingresar a Brasil.

Después de varios minutos, el árbitro del partido decidió dar por finalizado el partido y la Conmebol comunicó que se abrirá una investigación para determinar qué sucede con el clásico sudamericano.

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