¿Alguna vez has escuchado que con los ojos cerrados se disfruta mejor? Pues esa es la apuesta de Jumbo, que trae a Colombia su reconocida campaña “Con los ojos cerrados”, después de conquistar a los consumidores en Argentina.
La idea es simple, pero poderosa: transmitir la confianza de que elegir en Jumbo es tan fácil y seguro que podrías hacerlo sin ver. Y, claro, hacerlo con un estilo que mezcla sensaciones, sabores y experiencias que van más allá de lo visual.
En su versión colombiana, la campaña mantiene ese tono fresco y sensorial, pero aterrizado a lo nuestro: los productos locales, la frescura del campo desde su origen y la diversidad de sabores que reconocemos con solo probarlos. En Jumbo, dicen, se trata de disfrutar y confiar “con los ojos cerrados”.
Y si hay algo que aquí sí se disfruta sin necesidad de mirar, son las categorías insignia de la marca:
- Parrilla, con cortes de carne que despiertan su paladar.
- Panadería, con ese aroma que guía solo con el olfato.
- Mundo saludable, lleno de opciones frescas para quienes buscan equilibrio.
- Frutas y verduras, que conquistan por textura, jugosidad y sabor.
- Charcutería, donde basta un bocado para comprobar calidad.
- Platos preparados, prácticos, sabrosos y listos para disfrutar.
- Pescadería, con frescura que se reconoce al instante.
Además, el concepto conecta con algo que la ciencia ya ha explicado: cuando cerramos los ojos, nuestro cerebro activa las ondas alfa, un estado de concentración y relajación que nos permite percibir mejor los sonidos, los sabores y hasta los recuerdos. O sea, no es solo un slogan creativo, también tiene respaldo en cómo funciona la mente.
Con esta campaña, Jumbo quiere invitar a sus clientes a dejarse llevar por la experiencia, a sentir que cada compra es un viaje de confianza y placer para los sentidos.
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