Sin embargo, llegar a ese partido definitorio en un certamen ecuménico es un lujo que se dan muy pocos. Solamente 22, en el mejor de los casos 28, futbolistas logran realizar esta gesta que desde infantes anhelaron.

Solamente 11 van a cumplir el sueño de levantar el trofeo de 36 centímetros y 6,170 kg. diseñado por Silvio Gazzaniga a principios de los años 70. Los demás, llorarán y lamentarán no haber logrado el objetivo. Tal vez algún día tengan la revancha, probablemente no.

La final de un Mundial es tan especial que ha logrado silenciar al Maracaná en 1950 con 200.000 personas adentro, probablemente el día más triste de la historia brasileña y el más feliz de la uruguaya. Puede unir a un país azotado por una dictadura militar, irónicamente gritando los goles de un tipo al que le apodaban ‘Matador’ en 1978.

Es un partido que te puede convertir en un héroe al anotar el milagroso gol de la victoria en el último minuto de la prórroga, o ser inmortalizado en la historia como el villano más grande, quedándote solo mirando para abajo luego de errar el penal decisivo que le dio el triunfo al rival. Sí, la soledad puede agobiarte incluso estando en Los Ángeles en un estadio con más de 94 mil personas adentro.

Mundial USA 1994
Roberto Baggio (der.) se lamenta del penal errado en la final de 1994, mientras los brasileños celebran. / AFP

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¿Cómo llegar hasta allá? Los caminos son muchos. Puedes sacarte 5 ingleses del camino y meter un “barrilete cósmico” en el estadio Azteca, o llamarte Edson Arantes do Nascimento. Puedes hacer un ‘milagro en Berna’, o simplemente tener la ‘garra charrúa’; tener un ‘fenómeno’ con peinado raro, o que te valgan un gol que jamás fue. Simplemente hay que jugar al fútbol, aunque seguramente ganarán los alemanes, como dijo alguna vez Gary Lineker.

Si no cumples con ninguna de las anteriores características, no hay que perder la esperanza. Si los germanos campeones del mundo que iniciaron perdiendo el partido 2-0 antes de los 10 minutos ante los ‘mágicos magiares’ no lo hicieron, ¿por qué tu sí?

Estar en Moscú el próximo 15 de julio es posible y ni siquiera tienes que ponerte unos guayos para lograrlo. Budweiser llevará a 4 aficionados al Estadio Luzhnikí para que vean cómo se escribe un nuevo capítulo en la historia del fútbol.

FIFA Technical Tour
Panorámica del Estadio Luzhniki en Moscú, Rusia. / Getty

¿Cómo? Es muy fácil. Debes adquirir los packs Edición mundialista de Budweiser (el de 6, 12 y el de seis con vaso) que vendrán con un código promocional que deberás registrar en la página web de la marca hasta el próximo 10 de junio. Entre más registres, más opciones tendrás. Los ganadores serán anunciados entre el 11 y el 15 del mismo mes.

Además, podrás ver los partidos de la primera fase, octavos, cuartos en tu casa mientras disfrutas de una cerveza bien fría. Ya cuando los mejores 4 seleccionados estén preparándose para cumplir su sueño, tú estará viajando a Moscú.

Los jugadores de los equipos finalistas ingresarán a la cancha del Estadio Luzhnikí el 15 de julio a las 9.50 a.m. (hora colombiana) buscando plasmar sus nombres en la historia del balompié. Solo 11 lo lograrán, el resto probablemente pasarán al olvido. Sin importar a cual apoyes tú, lo importante es que jamás olvidarás haber sido uno de los 81.000 que vieron la final del Mundial en Rusia.