Mucho se dice acerca de la historia de este plato. Algunas personas afirman que se dio por primera vez en Francia o Alemania, pero la verdad es que nació en Rusia a finales del siglo XIX.
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Expertos en el tema han asegurado que esta receta es un homenaje a un miembro de la familia Stroganov, pero con el tiempo se ha ido escribiendo una nueva versión de los hechos.
Sería uno de los cocineros del conde Pável Stroganóv, André Dupont el que le diera un rumbo diferente a esta historia, ya que fue él quien dio a conocer la receta gracias a la aceptación del conde, quién tiempo después la bautizaría con su apellido. El plato se elabora con “filete de ternera cortado en tiras no muy gruesas” y se acompaña con setas y crema agria. Puede ser servido con papas fritas, e incluso arroz.
La propuesta gastronómica se popularizó en el inicio de la Segunda Guerra Mundial, y fueron los inmigrantes chinos y rusos los que la extendieron al continente americano, volviéndose muy reconocida en 1950.
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Preparación
Lleva a una olla 1 cucharada de mantequilla con el pollo en tiritas, salpimienta y cocina hasta que quede doradito.
En la misma olla agrega 1 cucharada de mantequilla, 1 cebolla cabezona en cubitos, 1 cucharada de ajo, 1 cucharada de harina y 1 taza de vino blanco.




Añade 1 cucharada completa de estragón y 1 cucharada de salsa negra. Mezcla y cuando veas que está espesando agrega 2 tazas de caldo de pollo, 2 tazas de champiñón en laminitas y 1 taza de crema de leche.
Incorpora el pollo, espera que se termine de espesar y disfruta.
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