Algunas personas son más imprudentes que otras. Es lógico y es algo que, con cierto cuidado, puede mejorarse. Aún así, todos hemos visto como alguien que queremos, estando en una relación, nos ha dicho cosas que nos han molestado alguna vez.

Es importante conocer estas frases o situaciones que pueden llevarnos a sentirnos incómodos o, incluso, a dolernos.

  1. Con mi ex esto era distinto: cualquier comparación con una ex o un ex puede llevarnos a suponer que la frase: todo tiempo pasado fue mejor. Esto, por lo general, puede hacer saltar las alarmas y hacerse incómodo porque las comparaciones son difíciles de encajar. Si es irremediable que hagas comparaciones, procura que sean en positivo hacia tu pareja actual, aunque de todos modos no recomiendo el estar juzgando con puntuaciones las relaciones porque atacan la seguridad que pueda tener nuestra pareja.
  2. Estás más gorda: infalible, es el tema que despierta toda la rabia que alguien pueda tener porque todos tenemos espejo, lo que pasa es que este tema en concreto se encaja fatal porque no siempre es fácil perder kilos o estar en forma. Hay otras formas de decir esto o, simplemente, hay que intentar no comentar sobre el peso de las personas, salvo que se nos pida expresamente nuestra opinión.
  3. Tu familia es insoportable: cualquier juicio sobre la familia de nuestra pareja es como una tortilla que lanzarás sobre tu propia cabeza. Por muy cierto que sea, es difícil salir airoso de esta situación porque la familia es la que es y no es susceptible de cambios. Si no te gustan tus suegros o tus cuñados, piensa de qué forma puedes gestionarlo sin necesidad de herir a tu pareja o de soltarle tus juicios sobre su familia.
  4. Mis amigos opinan que eres muy…. ¡Esta es la fórmula magistral para que tu pareja eche espumarajos por la boca! Está muy bien que los amigos tengan una opinión y, es más, soy de las que piensa que, como te conoce tu mejor amiga, nadie llegará a conocerte, aunque sus opiniones sobre nuestra pareja tendrían que permanecer en el anonimato. Lo que piensen nuestros amigos sobre nuestro novio o novia es importante, sobre todo para nosotros, y punto. Si además tenemos juicios de valor sobre nuestro aspecto o personalidad, cuando no nos conocen, éstos pueden hacer más mal que bien.
  5. No me gusta como te ves, no te queda bien ese vestido, o esos pantalones: este tipo de apreciaciones hay que saberlas decir y tener mucha mañita para que no sienten como una bomba sobre nuestras parejas. Todos deseamos vernos bien, todos deseamos aceptación y nos gustaría que lo que elegimos le gustara a nuestro novio o novia. Cuando nuestro estilo desencaja con lo que a él o a ella le gusta, de inmediato nos sentimos mal y tratamos de salir de la situación con frases cortadas o pidiendo una segunda opinión. Para hacer una sugerencia en el cambio de estilo es clave que el tono no sea agresivo y que pretenda dar alguna opción. Por ejemplo: estos pantalones te quedan bien, aunque me gustan más los que tenías ayer, por ejemplo. O tal vez, te combina mejor esa camisa con los zapatos que te regalé, ¿no crees?

*Las opiniones expresadas en este texto son responsabilidad exclusiva de su autor y no representan para nada la posición editorial de Pulzo.

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