La mujer se identificó como Karen, y en diálogo con Caracol Radio dijo que la situación ha sido muy difícil para esta familia bogotana, ya que todos sus integrantes estaban entusiasmados con la llegada de una bebé.
“Para nosotros, era una ilusión muy grande. Iba a ser la primera niña, la primera bebé, la primera nieta, la primera sobrina. Obviamente confiados en la buena fe de esta mujer que nos engañó. Es increíble cómo engañó a una familia entera, cómo engañó a todo un edificio con lo que pasó ayer”, comentó la afligida mujer.
Karen también se mostró decepcionada por todo el escándalo que armó la falsa embarazada con el supuesto robó de la bebé, y dijo, en la emisora, que aunque su cuñada estuvo a punto de salirse con la suya al final se supo la verdad.
“Lastimosamente, esta vez nos tocó a nosotros y fue terrible, porque lo que nos dijo ella es que no dijéramos nada y que ya dejáramos las cosas así. Mi familia es muy unida y lo primero que hicimos fue comenzar a movilizarnos en todo. Nosotros no nos podíamos quedar quietos. ¿Cómo pasa una cosa de estas y nos vamos a quedar quietos?”, se cuestionó la mujer.
Y no era para más, ya que la impotencia que sintió esta familia al enterarse de la noticia se acrecentó con la escabrosa escena que encontraron en la cocina de la casa: una mujer tendida en el piso sobre un charco de sangre (que no era suya), y junto a ella una placenta dentro de una bolsa plástica.
Esas fueron las imágenes que dio a conocer CM& Noticias, y detalló que junto a la impostora también hallaron una jeringa, con la cual fingió que le habían aplicado una sustancia para robarle a su bebé.
Pero toda esta escena resultó ser una mentira, y según contó en Noticias Caracol el paramédico Jaime Morales, que atendió a la paciente, la placenta en realidad era un trozo de carne que había comprado la mujer, y las ecografías que le mostraba a la familia las había bajado de internet.
Otro detalle que delató a la falsa embarazada fue “la poca sangre para ese parto”, así como un mensaje que ella escribió en el espejo del baño y que decía: “Ojo, no llamen a nadie, ni a la Policía, porque están vigilados”.
En este punto, el paramédico comentó en el noticiero que de ser cierto el robo del bebé, habría sido casi imposible que la mujer pudiera caminar hasta el baño para leer el mensaje y luego regresar a la cocina como si nada.
Finalmente, la mujer fue llevada al hospital de Kennedy y tras un examen de sangre se confirmó que no estuvo embarazada.
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