El pasado 8 de abril en horas de la tarde la líder social y senadora electa Aída Quilcué, denunció mediante un trino en su cuenta de Twitter que la Unidad Nacional de Protección (UNP), le notificó la reducción de su esquema de seguridad, decisión que pone en alto riesgo su vida y la de su familia.

Aída Quilcué, se convirtió en la primera mujer indígena en llegar a una de las curules para las poblaciones indígenas del país en el Senado de la República en las pasadas votaciones del 13 de marzo.

Desde 2003 ha estado al frente de diferentes movimientos desde el Consejo Regional del Cauca; donde ha liderado diferentes protestas en contra de la guerra en su territorio, demandas al gobierno por condiciones de vida dignas para los indígenas del Cauca, así como mejoras en el ámbito de la salud para los indígenas olvidados por el estado.

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Debido a ello, en el 2008 su esposo fue asesinado y desde entonces la defensora de derechos humanos, líder ambientalista y ahora senadora en la Circunscripción Especial Indígena ha recibido más de 100 amenazas de muerte.

El pasado 31 de diciembre en el resguardo indígena de Páez, norte del Cauca, se informó que seis hombres armados intimidaron a un grupo de niños para que entregaran información de la lideresa social y su familia. Debido a ello, varios de los hombres que conformaban su escuadrón de seguridad empezaron a renunciar por temor.

Unos meses después, el 25 de marzo, en una entrevista con la W Radio, Aida manifestó: “He tenido un esquema demasiado precario en el sentido en que no solamente a mí, sino a muchos líderes sociales, nos dan el carro más viejo y con las peores condiciones mecánicas. Aquí hago un llamado a que se proteja mi seguridad y a muchas personas que están en riesgo, pero como debe ser, no como lo están implementando en el momento”.

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La noticia del desmonte y reducción de medidas de protección a la senadora, en temporada de contiendas electorales, según Quilcué en anteriores intervenciones, siempre agudiza la situación .Esto implicaría un riesgo inminente a la lideresa social.

Del mismo modo, según la Defensoría del Pueblo, para el 2021 cerca de 145 líderes sociales fueron asesinados y, en los primeros 3 meses del 2022, 55 líderes han sido asesinados mayoritariamente en el territorio del Cauca.