La isla, que aún no se ha recuperado del devastador paso del huracán Iota, tiene una millonaria deuda con la empresa de energía Sopesa, que brinda ese servicio público en el archipiélago, detalló Caracol Radio.
Por su parte, los habitantes de la isla enviaron quejas masivas a la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, ya que aseguran que los valores de energía que les han cobrado son impagables, informó esa emisora.
Asimismo, denuncian que la empresa de energía ha estado cobrando el servicio a refugiados temporales que están en albergues y cuyas casas fueron afectadas por el huracán Iota, añadió esa cadena radial.
Al respecto, el gobernador de San Andrés manifestó que no se usarán recursos públicos para pagar este elevado valor, ya que primero se tienen que solucionar las irregularidades en los cobros de facturación, apuntó Radio Nacional.
“Las inquietudes de la comunidad con el costo en la facturación de energía no son de mi competencia, sino de la Superintendencia de Servicios Públicos”, indicó Hawkins, en diálogo con ese medio.
De igual forma, el gobernador hizo un llamado a la empresa de energía Sopesa, para que “por responsabilidad social en este momento de calamidad” no se corten los servicios públicos que afectarían a los habitantes de la región, agregó esa emisora.
La Procuraduría, además de pedirle un plan de pagos a Hawkins, manifestó que envió una solicitud a la Superintendencia para que visite la isla y verifique las denuncias de los ciudadanos que aseguran ser víctimas de los cobros elevados de energía, concluyó Radio Nacional.
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