El coronel de la Policía Nacional, Jorge Mauro Córdoba Valencia, aseguró que José Vicente Rubio Guayara atacó con escopeta y machete a los uniformados.

El Juzgado Penal Militar 161 del Quindío abrió la investigación preliminar por el delito de homicidio en contra de la patrulla que abatió a José Vicente Rubio Guayara, de 56 años, quien murió, producto de los impactos de arma de fuego.

Las autoridades señalaron que esta indagación es un procedimiento normal cuando un ciudadano pierde la vida a manos de policías que usan sus armas de dotación.

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El comandante de la Policía Quindío, coronel Jorge Mauro Córdoba Valencia, dio a conocer que la oficina de control disciplinario de esta autoridad inició la indagación preliminar a los patrulleros que atendieron el caso, registrado en horas de la tarde del pasado jueves en la vereda Morelia Baja del municipio de Quimbaya.

Según se conoció, la señora María Eugenia Díaz Cárdenas llamó a la Policía de Quimbaya, ya que estaba siendo, al parecer, golpeada por su compañero sentimental.

Sin embargo, los uniformados adscritos a la subestación de Policía La Española no pudieron atender la novedad y fue necesario el apoyo de los agentes de la subestación Trocaderos, que se dirigieron a la finca donde estaba ocurriendo el presunto maltrato.

Según el coronel Córdoba Valencia, José Vicente Rubio Guayara al ver a los policías, tomó una escopeta y disparó en contra de los uniformados.

De acuerdo con el reporte, en primera instancia los agentes no resultaron lesionados y, cuando —supuestamente— el campesino se quedó sin balas, decidió ingresar a la vivienda para buscar un machete.

El coronel aseguró que el agricultor salió de su casa y, sin mediar palabra, hirió en la mano izquierda y en el brazo izquierdo a uno de los policías, por esto el otro agente disparó. “Debió hacer el uso de la fuerza y el empleo de las armas de dotación oficial, para reducir al ciudadano”, dijo el coronel. 

A José Vicente Rubio Guayara le prestaron los primeros auxilios, pero murió de manera instantánea en el lugar de los acontecimientos mientras que el uniformado herido fue trasladado al hospital Sagrado Corazón de Jesús de Quimbaya.

Los médicos revisaron al patrullero, le sanaron las heridas y concluyeron que los cortes que había sufrido no eran de gravedad para poner su vida en peligro, pero sí solicitaron que fuera auscultado por Medicina Legal para determinar sus días de incapacidad laboral.

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Tras sus investigaciones, las autoridades concluyeron que María Eugenia Díaz Cárdenas, desde hace 10 años, era víctima de violencia intrafamiliar por su pareja sentimental, pero esta vez, tras denunciar y al ver que era atacada, solicitó la presencia de la Policía en la finca donde ocurrieron los hechos.

También se conoció que Rubio Guayara —el campesino abatido— tenía vigilancia electrónica por parte del Instituto Penitenciario y Carcelario, Inpec, ya que había sido condenado por violencia intrafamiliar, precisamente cometida contra su pareja sentimental.

Luego de lo sucedido, y como una autoridad no recurrente o participante, el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía, arribó al sitio de los sucesos para inspeccionar técnicamente el cadáver y recolectar los elementos materiales probatorios como la escopeta y el machete, supuestamente usado por el campesino, y las armas de dotación de los policías.

Este hombre, agregado de la finca donde residía con su pareja sentimental, también fue indiciado en el Sistema Penal Oral Acusatorio, Spoa, por el delito de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego del año 2011.