En primer lugar, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, dijo que espera un reporte actualizado del Puesto de Mando Unificado (PMU) que estaba atento al paro para consolidar las acciones que alteraron el orden público en Bogotá, Cali, Barranquilla y Medellín, pero que ya hay conductas identificadas:

“Lo que hay es unos actos que son francamente repudiables como bajar a los pasajeros de los taxis que estaban trabajando, bajar a los conductores, dañarles los vehículos, pinchar los carros… todas son conductas delictivas que se van a judicializar”.

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En ese sentido, el secretario de Seguridad de Bogotá, Jairo García, invitó a los conductores que fueron víctimas de estos hechos en la capital a poner “la denuncia ante la autoridad competente”, pues este miércoles fueron detenidas siete personas, y entregó detalles del proceso:

“Estamos evaluando las imágenes que tenemos disponibles, agradecemos las imágenes [de medios y redes sociales] para que podamos determinar, con las denuncias de los taxistas que fueron afectados, los procesos penales, si llega a ser el caso”.

El funcionario indicó también que el delito que les podrían imputar a los vándalos de 18 vehículos en la capital es el de daño en bien privado, pero que eso se determinará dependiendo de las denuncias de las personas afectadas, pues eso es lo fundamental en un proceso de judicialización.

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Por su parte, el secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo, señaló que durante la jornada se impusieron 90 comparendos por infracciones como bloquear vías, por no estar en el registro de conductores o por ocultar la placa que les podría acarrear multas de aproximadamente un millón de pesos; además, dijo que tienen otras “167 evidencias que llevaran a comparendos en los próximos días”.

García destacó que esas acciones no son “la forma de relacionarse de este gremio que requiere fortalecer la confianza y la buena imagen frente a los bogotanos”.

Entre tanto, Bocarejo añadió que en cuanto a las plataformas tecnológicas, que motivaron la protesta de los taxistas, el Distrito ya ha suspendido 6.000 licencias a conductores que prestan el servicio de transporte por aplicaciones y se les han inmovilizado los vehículos, mientras que 100 licencias ya fueron canceladas por 25 años.