Los que no saben qué ocurre en esta esquina de Bogotá simplemente ven a un grupo de hombres, vestidos con chaquetas de cuero y esferos en la mano, aparentemente hablando sobre la vida. Sin embargo, para quienes se han recorrido la ciudad saben que en esa esquina de la Avenida Jiménez con Carrera Séptima se vende la piedra más preciosa de Colombia: la esmeralda.

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En esa esquina se han cobrado venganzas, se han cerrado negocios multimillonarios e incluso, si se cuenta con suerte, se pueden encontrar a los esmeralderos más respetados del país. Todos en Bogotá saben que quien pasa por esa esquina lo debe hacer con precaución y que las esmeraldas son el bien más preciado de ese sector.

Quienes están en esa esquina no son más que intermediarios, pero son intermediarios que manejan millones y millones de pesos ya que una esmeralda puede costar hasta 400 millones de pesos. Hay personas que compran una pequeña muestra que les puede costar entre 100 y 200 pesos, pero los precios oscilan entre los 100, 150 y 200 millones dependiendo de los quilates.

Acá puede ver el video:

@josephplazap Hablemos de las esmeraldas‼️ #colombia #parati #foryou #josephplaza #shakira ♬ sonido original – Joseph Plaza

Ahora bien, no solo en la Avenida Jiménez con séptima se venden esmeraldas en Bogotá. Más arriba, hacía la carrera quinta, también se encuentran vendedores y se dice que el producto es de mejor calidad: mientras en la séptima son esmeraldas más opacas y sin brillo, lo que denota su calidad; en la plazoleta se ven mucho mejor, más verdes.

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Lo cierto es que este es un lugar “caliente”, frecuentado por negociantes, joyeros y extranjeros que se dedican a este negocio.

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