Ni el presidente Iván Duque, ni una gran parte del Congreso, ni de la dirigencia empresarial del país comprenden “el tamaño del descontento que se está tomando las calles de Colombia”, por eso “se siguen comportando bajo el patrón con que funcionan las democracias corporativas, donde la línea entre lo público y la empresa privada es tan tenue que se torna invisible”, indica María Jimena Duzán en su habitual columna en esa revista.
Acto seguido, la comunicadora expone cómo las recientes decisiones tomadas por el Congreso y en la Conversación Nacional liderada por Duque, a su juicio, favorecen solo a los empresarios y no atienden las quejas de líderes y participantes en las marchas que vive el país desde el pasado 21 de noviembre.
Según Duzán, en lugar de “fomentar un diálogo franco con los miembros del Comité del paro”, el mandatario ha estrechado “aún más los lazos con los que siempre habla, con los empresarios”.
En el caso del legislativo, la columnista critica que mientras esta semana se hundieron los proyectos de ley para elegir Fiscal General por meritocracia y reglamentar la eutanasia, esa corporación aprobó en primer debate la cuestionada Ley de crecimiento económico (antes de financiamiento).
Al criticar decisiones como los 3 días sin IVA anunciados para el próximo año o la reducción gradual en los aportes a salud que hacen los pensionados, la periodista dice que “ni el Presidente, ni el Congreso, ni la clase dirigente han entendido lo que está pasando en su país”.
Según el análisis de Duzán, dichas ofertas no responden a las peticiones de quienes marchan: “jóvenes de clase media que lograron acceder a la educación” y que hoy “no tienen empleo, ni oportunidades” y “sienten que van a perder lo que ya lograron”.
Entretanto, añade en su artículo de opinión, la mayoría de los empresarios en Colombia “están ciegos, sacando provecho de este gobierno corporativo”.
Por todas estas razones, la columnista pide “dejar de minimizar el descontento que se escucha en las calles”, no “ningunear” a los estudiantes que están protestando y a Duque, puntualmente, le aconseja “romper la coraza de su gobierno corporativo y demostrar que él no gobierna ni para los gremios ni para los grandes intereses económicos”.
La queja de María Jimena Duzán se asemeja bastante a la que presentó la semana pasada Ramiro Bejarano, en El Espectador, donde criticó la manera como el mandatario ha manejado las peticiones de los promotores del paro y cuestionó la presencia de empresarios en la primera reunión del Presidente Duque con los líderes de las protestas, dentro de la llamada Conversación Nacional.
A estos últimos, Bejarano los acuso de creer que “el Gobierno debe estar solo al servicio de sus voraces intereses”, mientras que de Duque dijo: “está viendo todo con la lente de los empresarios”.
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