
Las autoridades continúan investigando el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, con especial atención al momento en que el joven sicario recibió el arma utilizada: una pistola Glock 9 mm.
El Tiempo detalla que el arma le fue entregada al sujeto minutos antes del ataque, durante una parada cerca del parque El Golfito, en la zona residencial del barrio Modelia.
(Vea también: Nueva hipótesis sobre responsables de atentado contra Miguel Uribe; orden vendría de lejos).
Otro punto clave en la indagación es el celular del menor, el cual habría sido entregado a un cómplice en las inmediaciones del lugar del crimen.
La hipótesis principal señala que el atentado fue planeado por una organización criminal de alto impacto que habría delegado la ejecución del ataque.




Otro elemento central es el análisis del arma, cuya compra fue rastreada hasta el 6 de agosto de 2020, a nombre de Charles Joe Anderson en Arizona, EE. UU., a través del distribuidor Aji Port.
Además, las autoridades incautaron diversos elementos en las viviendas de los familiares del menor, incluyendo dos celulares, un computador portátil, cuadernos y documentos.
Estos dispositivos contienen más de 10 terabytes de información que están siendo analizados por peritos forenses. La investigación se fortalece con estos nuevos hallazgos, en medio del debate sobre la sanción que podría recibir el joven implicado, que por ley no superaría los ocho años de reclusión.
Qué le pasó a Miguel Uribe Turbay
El atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay generó gran conmoción en Colombia al revelarse que el presunto autor del ataque era un adolescente de 15 años.
El menor, capturado tras resultar herido mientras huía, confesó que ejecutó el atentado por una significativa suma de dinero con el fin de ayudar a su familia. Esta versión fue corroborada por un tío suyo, quien declaró ante las autoridades que el joven había sido reclutado bajo promesa de recompensa. El adolescente permanece bajo custodia médica en la Clínica Colombia y es acompañado por su tío, mientras se desarrolla la investigación.
El menor vivía con una tía materna en Engativá, ya que su padre reside en Polonia. Durante su detención, manifestó su intención de “entregar números”, lo que ha abierto hipótesis sobre una posible red criminal detrás del ataque. Las autoridades incautaron una pistola tipo Glock en su poder y trabajan para esclarecer quiénes estarían detrás del intento de homicidio.
El estado de salud de Miguel Uribe es crítico, tras recibir tres impactos de bala. El Gobierno colombiano anunció una recompensa de hasta 3.000 millones de pesos por información que conduzca a los autores intelectuales del crimen, recordando prácticas delictivas propias de la era de Pablo Escobar.
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