Hernández, un comerciante santandereano que quebró en 2018, debía ese dinero a la Dian desde 2016 y fue condenado en 2020 después de un veloz proceso jurídico que terminó en el castigo de 4 años de prisión, detalló Blu Radio.

“En 2016 empiezan a comunicarme con el abogado que, entre comillas, me defendía, que tenía un saldo con la Dian de 280.000 pesos más 32.000, en total eran 312.000 pesos. Yo había quedado quebrado y no tenía manera de hacer un arreglo, estaba pasando por una situación económica difícil, si había para comer no tenía para otras cosas, como para pagarle a la Dian”, detalló Hernández a esa cadena radial.

El hombre añadió que su contador le recomendó que lo mejor era dejar las cosas así. Esa decisión agravó la condena y llevó a una detención en un megaoperativo por parte de las autoridades, apuntó ese medio. (Vea tambiénU. Distrital pagó casi $ 2.000 millones de multa, por no declarar a tiempo impuesto en Dian).

La dura condena en contra del comerciante causó la indignación del padre Alberto Linero, quien consideró que la condena era desproporcionada, en comparación con la de otros evasores que acumulan deudas multimillonarias con la Dian.

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“A mí lo que más me preocupa de todo esto es la percepción de injusticia con la que uno queda. Yo entiendo el delito, entiendo que es condenado, todo eso lo entiendo, pero es desproporcionado. No podemos seguir haciendo creer que la justicia simplemente es para los de ruana. Si quiere, buscamos una cantidad de casos en los que las personas, con cifras mayores, no han ido a la cárcel. Eso es lo que a mí me molesta particularmente”, manifestó Linero, en Blu Radio.

Una vez se reveló el testimonio, esa cadena radial habló con la Dian. La entidad explicó que la omisión de agente de retención configura un delito. Sin embargo, aclaró que la condena fue analizada e impuesta por la Fiscalía General de la Nación.