Y es que el éxodo de personas en el pueblo es dramático: ahora hay apenas 2.700 habitantes en el lugar, pero en los años 90 había cerca de 8 mil y Candela era conocida como la ‘Pequeña Nápoles’, informa CNN Travel.

Las ofertas monetarias para quienes acepten la propuesta se dividen así: 800 euros (2’700.000 pesos colombianos) para una sola persona que se vaya a vivir a Candela, 1.200 euros ($ 4 millones) por pareja, de 1.500 a 1.800 euros ($ 5’100.000 a $ 6’100.000) para familias de 3 miembros, y 2.000 euros ($ 6’800.000) para familias de personas de 4 y 5 miembros.

Sin embargo, hay condiciones: los que acepten la oferta, obviamente, tendrán que establecerse definitivamente en el pueblo, arrendar una casa y tener un trabajo que le deje al menos un sueldo de 7.500 euros al año (casi 26 millones de pesos colombianos, o sea, más o menos 2’200.000 pesos al mes).

Los habitantes de Candela tienen muchas cosas para mostrar: sirven comida exquisita, toman buen vino y la seguridad es envidiable: no ha habido crímenes en al menos 20 años.

“Trabajo con pasión y compromiso cada día para regresar a Candela a su antiguo esplendor”, dijo el alcalde.

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El abandono de la ciudad no es solo una cuestión de Candela. De hecho, hay casos mucho peores. Por ejemplo, Civita di Bagnoregio, en Lazio, tiene apenas 12 residentes permanentes, por lo que tuvo que aplicar estrategias drásticas para visibilizarse. Y han funcionado, ya que el número de turistas al año ha pasado de 40 mil a 800 mil, agrega Independent.

Tampoco es nueva la estrategia de darles dinero a las personas que estén dispuestas a irse a vivir a los pueblos. Hace algunos meses, Bormida, un municipio en el norte de Italia, prometió regalar los mismos 2 mil euros que ahora ofrece Candela. Su problema, sin embargo, era mucho más crítico, ya que apenas tenía 394 habitantes.

La propuesta, entonces, está sobre la mesa. Vamos a ver si le funciona.