Con sus palabras el pontífice suplicó “frutos de consolación para el pueblo venezolano” para que “encuentre la vía justa, pacífica y humana para salir cuanto antes de la crisis política y humanitaria que lo oprime, y no falten la acogida y asistencia a cuantos entre sus hijos están obligados a abandonar su patria”.

Por otro lado, pidió “diálogo” en la península de Corea, donde los ensayos nucleares de Corea del Norte han acrecentado las tensiones en los últimos meses: “Que los que tienen responsabilidades directas actúen con sabiduría y discernimiento para promover el bien del pueblo coreano y para generar confianza en la comunidad internacional”.

Francisco asimismo instó a que se ponga fin “inmediatamente al exterminio” en Siria y “se respete el derecho humanitario” para permitir el acceso a la ayuda.

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El pontífice también abogó por la reconciliación en “Tierra Santa”, refiriéndose a los mortíferos choques del viernes en la frontera entre Israel y Gaza.

En cuanto a Yemen, un país devastado por tres años de guerra, también pidió “diálogo y respeto mutuo”.

Con AFP.