El deseo del joven colombiano identificado como Juan Pablo Montoya Tonuzco por llegar a Estados Unidos terminó en tragedia. El caleño, de 19 años, quiso atravesar el río Bravo en la frontera con México y murió ahogado cuando se encontraba nadando en el afluente. Su fallecimiento se dio el pasado 2 de diciembre de 2022, pero solo hasta el 4 de febrero de 2023 su familia se enteró de su deceso, según informó Red + Noticias. 

Ahora, sus seres queridos viven un flagelo por repatriar su cuerpo, pues es poca la información que tienen y el proceso para recuperar sus restos cuesta una millonada. Al respecto, su hermano David Correa Tonuzco se comunicó con Caracol Radio y dio detalles de esos trámites.  

“Ayer hicieron una videoconferencia con la Fiscalía en México, el consúl de Colombia y con el encargado de la morgue donde está Juan [su hermano]. Hicimos el reconocimiento del rostro y yo le pregunté al consúl si teníamos apoyo del Gobierno, pero solo nos brindan una asesoría jurídica y los costos los debemos asumir nosotros, porque él estaba ilegal”, indicó.

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Además, dio cifras de lo que puede costar la repatriación: “Hay un abogado que nos cobra 28 millones y otro 24. También nos dijeron que averiguaramos con una funeraria local y estamos en eso. Algunas personas nos han ayudado, pero es difícil”.

También, su familiar contó cuál era el motivo del viaje de su hermano a territorio norteamericano y cómo era la relación que tenían: “Él tenía ese sueño de ir a Estados Unidos. Ayudar a mi mamá, quería cumplir sus sueños y estar allá. Me decía papá”.  

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Por otra parte, su madre Nilce Tonuzco habló en Noticias RCN y contó que la última vez que habló con él fue cuando estaba a punto de cruzar el río: “Me dijo: ‘madre, ya estoy frente al río Bravo, ya este es el punto final, madre, esto solo se vive una vez'”.

Finalmente, la mujer también reveló que intentó convercer a su hijo de desistir de la idea de cruzar la frontera; sin embargo, él estaba empecinado en pasar a Estados Unidos: “Yo le dije a mi hijo que prefería que se devuelva de ahí de México, yo no quería que siguiera. Pero me dijo ‘madre, es mi sueño, déjame intentarlo de nuevo'”.