También el balance de las víctimas mortales fue en aumento en las últimas veinticuatro horas, reveló el jueves por la noche el sheriff del condado de Butte, Kory Honea.

“Hemos encontrados los restos de otras siete personas”, dijo el sheriff en una conferencia de prensa transmitida por las principales cadenas estadounidenses.

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El hallazgo eleva a 63 la cifra de fallecidos en el llamado Camp Fire, el incendio más voraz de la historia de California que continúa desde el 8 de noviembre en Butte, norte del estado, y está contenido apenas en un 40 por ciento.

Con las tres víctimas fatales registradas en el incendio Woolsey, en el sur, el número total sube a 66.

El jueves, más de 9.400 bomberos estaban combatiendo las llamas en California con la ayuda de 1.202 vehículos y 121 tractores.

Incendios en California
Policías sacan restos humanos de un vehículo en Paradise, California. / Justin Sullivan/Getty Images/AFP

Los incendios, que se fueron propagando rápidamente debido a los fuertes vientos, arrasaron en los últimos días una superficie superior a los 982 kilómetros cuadrados y destruyeron casi 11.000 instalaciones, según el Departamento de Protección Forestal y Lucha contra Incendios de California.

El Camp Fire, que destruyó más de 9.800 viviendas y redujo a cenizas la ciudad de Paradise, continúa en un área de 570 kilómetros cuadrados, el equivalente a una ciudad como Manizales (incluyendo su área metropolitana).