Los abogados defensores de Sean ‘Diddy’ Combs, reconocido rapero y empresario estadounidense, han solicitado ante el tribunal federal de apelaciones de Nueva York su liberación inmediata. En caso de que esto no sea concedido, piden al menos una reducción de la sentencia de 50 meses de prisión que actualmente cumple en una cárcel federal de Estados Unidos. La situación jurídica de Combs ha sido ampliamente seguida tanto por medios estadounidenses como internacionales debido a la notoriedad del personaje y las implicaciones de su condena.
Combs permanece actualmente recluido en la prisión federal de Fort Dix, en el estado de Nueva Jersey, donde su fecha de salida estimada está programada para mayo del año 2028. Sin embargo, la defensa sostiene en su apelación más reciente, presentada esta semana, que la sentencia dictada fue excesiva y no respetó el veredicto que previamente había definido el jurado. Según información divulgada por la revista Variety, el extenso recurso, de 84 páginas, fue presentado por su abogada Alexandra A.E. Shapiro, quien cuestiona que el juez Aran Subramanian actuó fuera de sus facultades al momento de imponer la condena.
La estrategia de la defensa se centra en la acusación de que el juez, al dictar sentencia, habría asumido el papel de “decimotercer jurado”, una figura informal que sugiere injerencia indebida del magistrado frente al fallo del jurado. El fundamento del escrito señala que el juez Subramanian desafió la decisión del jurado al concluir que Combs había coaccionado, explotado y obligado a sus parejas sentimentales a mantener relaciones sexuales, liderando incluso una conspiración de carácter criminal, pese a que el jurado no lo halló responsable de esos cargos.
La apelación subraya que, habitualmente, los condenados por delitos de transporte con fines de prostitución suelen recibir sentencias de menos de 15 meses, inclusive en casos donde sí se ha determinado la existencia de coacción, situación que según el equipo de defensa no se dio en este caso en particular. Por este motivo, consideran que los 50 meses impuestos a Combs son desproporcionados en comparación con sentencias previas por delitos similares.
En julio, el jurado declaró culpable a Sean Combs por dos cargos ligados al transporte con fines de prostitución, pero lo absolvió de las acusaciones más graves: conspiración para cometer crimen organizado y tráfico sexual, cargos que habrían supuesto penas mucho más altas. Al dictar sentencia en octubre, el juez Subramanian justificó la extensión de la condena considerando los antecedentes violentos de Combs, incluidos episodios ampliamente difundidos en medios, como el video de una agresión contra su entonces pareja Casandra ‘Cassie’ Ventura, ocurrido en 2016.
Durante la audiencia de sentencia, el juez remarcó a Combs que el poder que tenía para perjudicar debía utilizarse en adelante para ayudar, urgiéndolo a aprovechar la oportunidad de rehabilitación. Este señalamiento fue interpretado como una invitación a la reflexión, al tiempo que exponía la severidad con la que consideró los antecedentes del artista.
En su defensa, el equipo jurídico de Combs también argumentó que algunas de las acusaciones, incluyendo la grabación de actos sexuales y su difusión, estaban protegidas bajo la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, relativa a la libertad de expresión. Sin embargo, este argumento ya había sido rechazado en instancias anteriores por el mismo juez Subramanian, quien no consideró aplicable dicha protección en este contexto.
La decisión final ahora descansa en manos del tribunal de apelaciones de Nueva York, el cual deberá decidir si corresponde liberar de inmediato al rapero, reducir la sentencia impuesta o, por el contrario, mantener la condena intacta. El desenlace de este proceso será determinante para el futuro de Sean Combs y es seguido atentamente tanto en el ámbito judicial como en la opinión pública.
¿Por qué los antecedentes de violencia influyen en la severidad de las sentencias?
La referencia a antecedentes de violencia durante un proceso judicial suele ser un factor agravante considerado por los jueces al momento de dictar sentencia. En el caso de Sean Combs, el juez mencionó de manera explícita un incidente violento hacia su expareja Casandra ‘Cassie’ Ventura registrado en 2016, así como la amplia difusión pública de dicho episodio. Este hecho sirvió como elemento para justificar una condena mayor a la usual para delitos comparables.
La valoración de antecedentes persigue la finalidad de proteger en mayor medida a posibles futuras víctimas y subrayar la intención de disuadir conductas reincidentes. Sin embargo, este proceder legal genera debates en torno a la ponderación adecuada entre las pruebas vinculadas al caso y el historial del acusado, aspecto central para la defensa de Combs en su apelación.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
LO ÚLTIMO