En el sueño, que le contó Castro al programa ‘Lo sé todo’, vio a Legarda “en una cama linda, grandototota. Bellísima, de cristal, como yo lo llamo ‘niño de cristal’, y que estaba dormidito, así todo dorado, todo lindo, y yo estaba mirándolo al lado y, de pronto, se había despertado como asustado de que le tocaba hacer algo y se había pasado la mano por la cabecita, que el disparo le dio a él en la cabecita, y yo lo tranquilicé: ‘tranquilo, mi amor, tranquilo. Sigue durmiendo, duerme’. Y le pasaba yo la mano por la cabeza y él cerraba los ojitos y me decía ‘bueno, linda. Gracias, abuelita’”.

Más adelante, el reguetonero se levantaba y se sentaba al lado de la actriz: “Nos estaban haciendo una entrevista a los dos, y él me tenía abrazada, como en una foto que estamos con ‘Luisita’ de una mano y yo de la otra”, detalló.

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Margalida añadió que la “entrevista era muy divertida, él se reía y yo también me reía. Entonces yo consideré que él estaba muy contento, que estaba tranquilito y llamé a María (hermana del artista): ‘me soñé con el niño, está en una cama de cristal en el cielo. O sea, mejor dicho, está enseñándoles reguetón a los angelitos”.

En la entrevista con ‘Lo sé todo’, Margalida recordó que entre los mejores momentos que vivió con Legarda están “cuando me enseñaron a bailar su música, con ‘Luisita’” y “cuando me pidieron que fuera la madrina de su matrimonio, porque se iban a casar”.

Margalida ha destacado en varias ocasiones la calidad humana, transparencia y lo buen muchacho que era Legarda, por lo que dijo que “era sobrenatural. Ese niño no tenía que estar más en este planeta, cumplió lo que le tocaba cumplir y se fue”.