En política puede haber tantas maneras de hacer campaña como lo permita la imaginación. Ha habido incluso casos en los que los candidatos hasta se desnudan para captar la atención del electorado. Lo más común es, sin embargo, que las piezas propagandísticas se centren en exaltar la imagen del candidato o insinúen aspectos de las ofertas que hacen. En raras ocasiones el foco es referirse a los contendores, pero a eso se está llegando en Colombia.

Uno de esos casos es el del representante a la Cámara por el Centro Democrático Edward Rodríguez, que ahora aspira al Senado en las próximas elecciones legislativas y para lograrlo apeló a la idea de mandar a hacer 20 vallas, que instalará en varias ciudades del país, entre ellas, Bogotá, Cali y Medellín, en las que el mensaje directo es una invitación a parar al candidato del Pacto Histórico Gustavo Petro.

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“Paremos a Petro”, reza el mensaje debajo del nombre de Edward Rodríguez, todo en mayúscula sostenida, y encima del logo del Centro Democrático. Al lado, el candidato, en mangas de camisa, hace la señal de pare con su mano derecha y una mirada adusta.

Las vallas de Rodríguez se conocieron este miércoles, el mismo día en que el Pacto Histórico hiciera el lanzamiento formal de sus listas a la Cámara de Representantes por Bogotá y al Senado de la República, acto en el que estuvieron los precandidatos Petro, Francia Márquez, Arelis Uriana y Camilo Romero.

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“¡Paremos a Petro! ¡Ya es el 22! Paremos las primeras líneas, paremos el terrorismo urbano. Juntos ¡Paremos a Petro!”, escribió en un trino Rodríguez, para presentar las vallas de su campaña contra Petro. Y en otro trino escribió: “¡Paremos a Petro! Que es el sentir de millones que decimos: Paremos los paros violentos, paremos ese terrorismo urbano que romantizaron. Paremos la primera línea. No me cansaré de repetirlo ¡PAREMOS A PETRO!”.

Otro candidato al Senado que decidió apelar a poner en el foco de su campaña a sus contrincantes es el petrista Hollman Morris, del movimiento Fuerza Ciudadana, que instaló vallas en las que lo único que les plantea a sus potenciales electores es que será “Senador 100 % anti-uribista”.

Mi campaña reúne el sentimiento de los ciudadanos, ciudadanos que le apuestan a un nuevo país y que rechazan todo lo que ha sido el uribismo”, dijo Morris en W Radio. “Mi valla no es de odio, es una realidad y hoy Colombia es 100% antiuribista”.

Ambos casos demuestran que algunas campañas políticas en Colombia todavía tienen mucho de esas viejas prácticas de atacar a los contrincantes y agitar las pasiones ideológicas antes que ofrecer programas y propuestas que beneficien a los ciudadanos.