La contribución de los taxistas se centra básicamente en dos pagos. El primero es una afiliación a una empresa de transporte que les permite lograr más carreras y estar conectados en la ciudad; por este concepto pagan 840.000 pesos mensuales (en Bogotá) y 480.000 pesos (en Medellín).
El segundo es la tarjeta de operación, más conocido como seguro contractual y extracontractual, según La República. Este tiene un costo en Bogotá y Medellín de un millón de pesos.
Lo anterior no incluye el famoso cupo que se paga en diferentes ciudades y que equivale a varios millones de pesos. Sin embargo, los mismos conductores de taxi reconocen que este valor se ha reducido de forma significativa desde que llegaron Uber y otras plataformas al país.
En contraste, agrega ese diario, Uber paga alrededor de 500.000 pesos anuales en impuestos por cada conductor. Incluso, La República hace una estimación de que Uber paga 44.000 millones de pesos en impuestos en Colombia.
Las cuentas de lo que pagan los conductores de los diferentes servicios mencionados fueron traídas a colación luego de la resolución que expidió el Ministerio de Transporte y que ordena suspender el pase por 25 años a quienes presten el servicio público de transporte en carros particulares.
La norma entró en vigencia el pasado jueves 13 de diciembre porque, según la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, citada por Caracol Radio, “existe una correlación trágica entre la ilegalidad y la siniestralidad vial”.
“Nosotros (como Ministerio) tenemos que garantizar a los empresarios que cumplen con todas las normas legales que tengan unas reglas de juego equivalentes y transparentes”, dijo en su momento la jefa de la cartera de Transporte.
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