Así lo reveló un informe del periódico El Tiempo, en el que se estableció que lo más importante es planificar la educación con suficiente tiempo, para que a largo plazo no afecte la situación financiera de la familia.
Ese medio de comunicación señaló que “en los últimos nueve años el costo de un semestre de universidad se ha incrementado cerca de 20 %”. De hecho, aclaró que, hoy por hoy, se están pagando alrededor de 9 millones de pesos por cada seis meses de estudio.
A continuación, varías de las opciones para que el estudio de sus hijos no se convierta en un dolor de cabeza, según El Tiempo:
Seguro educativo: esta es una de las mejores opciones para planificar el pago de una carrera universitaria. La póliza de estudio se adquiere en la época de escolaridad del hijo y, año a año, se va pagando una cuota para que a largo plazo las aseguradoras puedan costear todo el proceso universitario.
“Cuanto menos años tenga al momento de tomar (el seguro universitario), el pago se diferirá a un mayor plazo” explica el medio, que advierte que la idea es hacer aportes mensuales en los que se fije un ahorro.
Cesantías: esta posibilidad se da cuando el padre del estudiante cuenta con dinero guardado en los administradores de cesantías y pensiones. Si es así, este ahorro puede servir para financiar la carrera o como garantía de pago ante una entidad financiera. Según El Tiempo, el Fondo Nacional del Ahorro (FNA) ofrece préstamos bajo esta modalidad.
Crédito bancario: puede usarse cuando se financia toda la carrera universitaria. Sin embargo, se recomienda estudiar las opciones que se ofrecen en el mercado, pues es necesario que el crédito se adapte a las necesidades de la familia. Es decir, que el presupuesto de pagos no afecte las finanzas del hogar.
LO ÚLTIMO
.svg)
