
A los 65 años, la idea de solicitar una tarjeta de crédito puede parecer abrumadora o incluso innecesaria para algunos, especialmente si ya se ha pasado una vida manejando las finanzas de otra manera. Sin embargo, tener una tarjeta de crédito a esta edad ofrece beneficios significativos, desde la conveniencia de no cargar efectivo hasta la posibilidad de construir un historial crediticio sólido que puede ser útil para futuros préstamos o incluso para emergencias.

Justamente, hay bancos que ofrecen tarjetas de crédito para pensionados, pensadas para que este sector de la población tenga un acceso sencillo a todos los productos que hay en el mercado financiero. La idea, no es que sea solo un servicio para ellos, sino también para sus familiares y así construir un futuro próspero y con las mismas posibilidades.
Para las personas de 65 años que desean obtener una tarjeta de crédito, el proceso se centra en demostrar estabilidad financiera y capacidad de pago. Las entidades bancarias considerarán principalmente los ingresos (pensiones, rentas, etc.), el historial crediticio existente (si lo hay) y la relación deuda-ingreso. Si no tiene un historial crediticio previo, una buena opción suele ser comenzar con una tarjeta de crédito asegurada, donde se deposita una garantía que funciona como límite de crédito, según las páginas web de Bancolombia, Banco Popular y Banco Caja Social.
Algunos de los requisitos son:
- Ser pre pensionado (encontrarse a 3 años o menos de cumplir los requisitos para acceder a la pensión de vejez) o ser pensionado.
- Recibir mesada pensional o estar próximo de comenzar a recibirla.
¿Cómo puedo saber si soy apto para una tarjeta de crédito?
Determinar su elegibilidad es un paso fundamental. Generalmente, las entidades financieras evalúan diversos factores, siendo los más importantes sus ingresos mensuales estables y su historial crediticio. Se busca que demuestre la capacidad de pago necesaria para asumir la deuda, por lo que presentar un empleo fijo o una fuente de ingresos comprobable es crucial.
(Vea también: Qué clubes recreativos hay en Bogotá para pensionados: plan para no oxidarse y pasarla bien)
Asimismo, contar con un buen comportamiento previo en el manejo de créditos, como préstamos o incluso servicios a plazos, será un punto a su favor. Si es nuevo en el mundo crediticio, es posible que deba empezar con opciones más básicas o tarjetas de tiendas departamentales para construir ese historial inicial.




¿Cuál es el puntaje mínimo para una tarjeta de crédito?
No hay un puntaje mínimo universal establecido en las centrales de riesgo para obtener una tarjeta de crédito en Colombia. Cada entidad financiera (bancos, cooperativas, etc.) tiene sus propios criterios internos y modelos de riesgo para evaluar las solicitudes. Estos modelos son complejos y consideran una variedad de factores más allá de solo el puntaje, como tus ingresos, estabilidad laboral, historial crediticio previo (si lo tienes), y la relación deuda/ingreso. Un puntaje alto es beneficioso, pero no garantiza la aprobación, así como un puntaje moderado no significa un rechazo automático si los demás factores son favorables.
No obstante, lo ideal es contar, como mínimo, con 600 o 700 puntos. Para mejorar las posibilidades de aprobación, lo más importante es mantener un historial crediticio saludable. Esto incluye pagar sus deudas a tiempo, evitar sobreendeudarse, y usar el crédito de manera responsable. Si no tiene experiencia crediticia, puede empezar con productos más sencillos como un plan pospago de celular.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO