La precisión del colombiano fue tan grande que el balón se metió por el centro del arco, muy al borde del travesaño, y el arquero, que intentó volar para impedir la anotación, tuvo que ver como la pelota se metía al fondo de la red a pocos minutos del final del segundo tiempo del alargue.

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La anotación del colombiano significó el 2-1, a favor de River, que desempató la serie y con la que el equipo de la banda cruzada acariciaba su cuarto título de Copa Libertadores.

No obstante, luego de que Boca se descuidara en la defensa para intentar igualar el marcador y obligar a la definición de la copa en los penales, Quintero puso un pase preciso para Martínez, que sin arquero rival, sentenció el 3-1 (5-3 en el global).