Horas después de culminada la ida de la final de la Copa Libertadores, que terminó en empate a 2 goles entre Boca Juniors y River Plate, Franco Armani viajó a Casilda, su ciudad natal.
Uno de sus representantes hizo público su encuentro con el exportero de Atlético Nacional, en el que compartieron unos mates y una merienda.
Armani deberá regresar a Buenos Aires este miércoles para reiniciar entrenamientos con su equipo, con miras a la gran definición del título continental, que se llevará a cabo el sábado 24 de noviembre.
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En el partido del pasado domingo, Armani fue responsable del primer gol que recibió en contra. Sin embargo, el argentino mostró sus reconocidas habilidades a minutos del final del partido salvando a River Plate de recibir una anotación que le habría dado la victoria a Boca Juniors.
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