Cuando era tan solo un bebé, James Rodríguez arribó a la capital del Tolima con su madre y se establecieron en la que era la casa de sus abuelos en el barrio Arkaparaiso, lugar donde compartieron por años una misma habitación. La dirección exacta: Manzana B, casa 21. En ese entonces, el barrio era tranquilo, poco poblado y sin edificios.
En la actualidad solo queda el recuerdo de aquella morada. Ahora, en ese punto hay un edificio de tres pisos con un local comercial.
(Vea también: Tamales, fútbol y otras razones que unen a James Rodríguez con el Tolima)
Fue en las calles de este sector donde a James le nació el amor por el fútbol que hoy lo tiene triunfando en equipos internacionales. Fue en la cancha de la zona donde metió sus primeros goles, y su pierna zurda se volvió fuerte.
Así luce el barrio dónde creció James Rodríguez
Según los vecinos del sector, cuando James era un niño, frente a su casa existía una cancha de arena que ahora es reemplazada por locales comerciales, y desde el balcón de su casa se asomaba curioso a ver los entrenamientos del Cooperamos Tolima.
Por otro lado, el barrio cuenta ahora con un bonito parque que James no alcanzó a disfrutar, pero en el que hoy en día cientos de pequeños entrenan esperando alcanzar la agilidad y éxito del futbolista que pisó las mismas calles.
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