Aunque la selección europea acumula un gol menos que Colombia en el certamen (8 goles frente a 9), su poderío de ataque está concentrado en solo esos tres jugadores.

En los nuestros, el ‘Cucho’ Hernández tiene tres tantos, Luis Sinisterra tiene dos e Iván Angulo, Deiber Caicedo y Luis Sandoval tienen uno cada uno.

Esto podría facilitarle el trabajo a Colombia en su juego de este jueves por los cuartos de final del Mundial Sub-20, pero solo si el cuerpo técnico lo estudió con cuidado para evitar sorpresas. De otro modo, podría ser (literalmente) todo un dolor de cabeza.

La dificultad radica en que las estrategias del rival de turno para hacer valer sus capacidades se contrarrestan con repeticiones durante los entrenamientos para memorizar referencias y marcas, algo que no es del todo el fuerte colombiano. Y aunque lo fuera, esto no siempre es del todo efectivo.

Además de ser un bastión en su defensa, la tricolor debería cuidarse cuando Popov, con sus 1,86 de estatura, se aproxime al área contraria para los cobros de pelota quieta. Por medio del juego aéreo ha conseguido anotarle a Estados Unidos, Catar y Panamá.

En esa dinámica es igualmente importante Buletsa, que es el del pie fino en la selección ucraniana y ha sido el encargado de habilitar a su compañero para sus tres anotaciones. Además, ya lleva dos gracias a la precisión de su pegada.

Esto sin dejar por fuera a Sykan, que de seguro es el referente cuando se trata de jugadas en movimiento. Ya tiene recorrido profesional en primera división y no puede soslayarse su experiencia en ese sentido.

Como Colombia, Ucrania también ha recibido solo tres goles, pero viene invicto con tres victorias y un empate.

El diagnóstico es claro para el técnico Arturo Reyes, que ha mostrado capacidad de hacer buenos planteamientos, pero también con algunas sombras en otros momentos.