Valentina Berr fue reconocida como futbolista mujer, después de haberse instalado en el gobierno de Cataluña con una solicitud para poder ser una mujer trans, que disputara la liga femenina de esta región de España. Después de un tiempo jugando, decidió retirarse por sufrir transfobia (fobia a personas transexuales). Esto estremeció al mundillo del fútbol español y el impacto que puede tener en el deporte, esta decisión.

Berr publicó en su cuenta personal de Instagram, unas palabras de despedida acompañadas de un mensaje de denuncia que asegura que, esta decisión está basada en sufrir varios actos de discriminación por ser una persona transexual, que decidió ser mujer y poder competir como tal en la élite del fútbol en España, más exactamente en Cataluña.

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En una publicación de nueve páginas de Instagram, expresó un mensaje directo a sus seguidores y agradeció a cada una de las personas que hicieron parte de este proceso y aseguró que “Lo primero que quiero decir, es que no cuelgo las botas, me las cuelgan” señalando que sufrió de varios ataques por ser trans.

“Ya no podía aguantar más los ataques de pánico y de ansiedad que estaba sufriendo cada vez que, de forma más frecuente, antes y después de entrenos, partidos. Llevo 4 años sufriendo en silencio el odio y la violencia estructural contra las mujeres trans, por parte de instituciones, medios de comunicación y también de mucha gente que se dedica a acosar” aseguró Berr, en su mensaje de despedida.

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“No puedo despedirme del fútbol sin dar las gracias a mi familia en su sentido más amplio, al Terrassa FC, Levante y por supuesto al CE Europa” clubes que le abrieron y terminaron siendo el escenario para finalizar también su carrera profesional. Una despedida con sabor amargo, porque según Berr no va con lo que le dice el corazón, pero sí la cabeza.

“Somos lesbianas, heteros, bisexuales, chicas muy masculinas, chicas muy femeninas, también chicas trans, personas no binarias, incluso chicos trans, porque desde dentro, el fútbol femenino es rico y procura abrazar a toda aquella persona que desee formar parte”.

Esta lucha no es nueva, pues en 2018 habló sobre este mismo tema, uno que concierne a muchas personas a nivel global. Para este año aseguraba que ya tenía problemas por militar en el fútbol femenino. “Ser mujer trans todavía quiere decir comenzar el día sin tener idea de muchas de las violencias que te vas a encontrar, hagas lo que hagas”.

Alba Palacios fue la primera jugadora trans en España y abrió la puerta para que Valentina hiciera lo mismo. En este orden de ideas, Palacios sigue jugando para Torres FC y Berr decidió retirarse para no aguantar más el yugo del prejuicio social en las canchas y fuera de ellas.