El Once Caldas enfrenta una encrucijada significativa en la temporada 2025 tras quedar eliminado de la Copa Sudamericana y centrar su atención en la Copa BetPlay y la Liga BetPlay, dos competencias en las que los resultados recientes han sido desfavorables. El club, que actualmente ocupa la undécima posición con 19 puntos en la Liga BetPlay, permanece a solo un punto del octavo lugar, este último ocupado por Independiente Santa Fe con 20 unidades, según la información oficial de Dimayor. Esta proximidad en la tabla mantiene encendida una esperanza de alcanzar la fase de playoffs, aunque el margen de error es mínimo.
El panorama para el equipo es adverso: fue superado por Atlético Nacional en la Copa BetPlay durante un partido en el estadio Palogrande —la casa del Once Caldas— y recibió una goleada histórica en la Liga, lo que agudizó la preocupación de dirigentes y aficionados. Resulta relevante que, a pesar de esta caída, los rivales directos no lograron distanciarse de manera significativa, lo que deja al club en el umbral de posibilidades matemáticas. Para consolidar su clasificación, Once Caldas debe acumular al menos 11 o 12 puntos de los 15 posibles en las últimas cinco jornadas, enfrentando equipos como Llaneros, Unión Magdalena, Millonarios, Deportivo Pasto y Deportivo Cali, cada uno con desafíos y exigencias propios.
El golpe sufrido por el conjunto blanco en su propia cancha fue un hecho atípico. Según registros históricos, la última vez que Once Caldas cayó por una diferencia de cuatro goles como local fue en 1971 frente a Independiente Santa Fe, una estadística que enfatiza la urgencia de enmendar aspectos tácticos y de concentración mental. Directivos del club han reiterado que, a pesar de los reveses, la eliminación en las competencias principales aún no está consumada y que la plantilla, junto al cuerpo técnico, debe realizar transformaciones profundas en su funcionamiento para reencauzar el rumbo, tal como ocurrió cuando Once Caldas fue el equipo colombiano con mejor desempeño internacional en este año, de acuerdo con fuentes internas del club.
El análisis del caso revela que el fútbol colombiano es altamente competitivo y volátil: la diferencia entre el éxito y el fracaso se reduce, en muchos casos, a un solo punto. La presión para lograr aproximadamente un 80% de efectividad en los encuentros restantes representa un reto tanto técnico como psicológico para el plantel. De acuerdo con cifras de El Espectador y Dimayor, equipos en situaciones similares experimentan modificaciones tácticas y pruebas de cohesión para superar los momentos más desfavorables del calendario.
Al contexto local se suma el proceso de profesionalización del balompié colombiano, donde la tecnificación y el análisis de datos táctico-físicos cobran cada vez mayor relevancia. Entidades como la Federación Colombiana de Fútbol y firmas analíticas especializadas, caso DataFactory, subrayan que las inversiones en tecnología influyen directamente en la competitividad de los equipos en los tramos decisivos de los torneos. En este escenario, la recuperación de futbolistas clave, como Robert Mejía, es considerada fundamental para restablecer la dinámica de grupo, un factor que, según expertos de medios como Win Sports y ESPN, puede marcar la diferencia en instancias cerradas.
Por otro lado, la repercusión de estos resultados va más allá de la esfera deportiva: la salud financiera del Once Caldas depende también de su acceso a rondas finales, pues esto se traduce en mayores ingresos por premios y patrocinios, tal como resalta un análisis de Revista Marca orientado al impacto económico de los clubes colombianos. Esta tarea implica decisiones integrales que no solo apunten a lo técnico, sino que también incorporen estrategias logísticas y motivacionales acordes a las exigencias del momento.
Finalmente, la presión social y mediática acompaña el clima de tensión interna, conforme lo destacan análisis de Coldeportes en el plano de la psicología deportiva. El equipo debe gestionar de manera adecuada las emociones, el estrés y las expectativas, factores que pueden definir el desenlace de esta recta final. Por todo esto, el futuro inmediato del Once Caldas dependerá de su capacidad de reacción y adaptación tanto en lo deportivo como en lo organizacional, en un entorno donde la exigencia y la historia juegan un papel determinante.
¿Cuáles son las principales causas de la crisis deportiva en el Once Caldas esta temporada? La crisis deportiva por la que atraviesa Once Caldas en 2025, de acuerdo con la información reportada por directivos y medios como El Espectador, se relaciona con una combinación de factores. Entre ellos destacan derrotas puntuales en partidos clave —como la goleada sufrida en el estadio Palogrande y la eliminación en la Copa BetPlay contra Atlético Nacional—, así como ciertos desajustes en la estrategia táctica y la preparación mental del equipo. Además, la incapacidad de sumar puntos frente a rivales directos ha mermado la confianza del grupo en momentos decisivos, repercutiendo directamente en sus posibilidades de avanzar en la tabla de posiciones.
Esta situación también se agrava debido a la necesidad de ajustar elementos tanto del plantel de jugadores como del cuerpo técnico, según reconocen los propios directivos del club. La exigencia creciente de la Liga BetPlay, que obliga a mantener una alta efectividad jornada tras jornada, ha expuesto debilidades estructurales en el funcionamiento del Once Caldas y exige respuestas rápidas para evitar quedar fuera de la élite del fútbol colombiano.
¿Qué significa “performance” en el contexto del fútbol profesional? El término “performance”, mencionado por directivos de Once Caldas y citado en reportes de fuentes como DataFactory, se refiere al desempeño global de un equipo, es decir, a la calidad y cantidad de logros deportivos obtenidos durante una temporada. Este concepto abarca no solo los resultados finales, como los puntos sumados o los partidos ganados, sino también el rendimiento táctico, físico y mental exhibido por jugadores y cuerpo técnico en el desarrollo de los encuentros.
En el caso del fútbol profesional, analizar la “performance” implica evaluar si el equipo responde satisfactoriamente a los objetivos planteados, tanto a nivel colectivo como individual. En el caso de Once Caldas, la “performance internacional” positiva a comienzos de año contrasta con los resultados recientes en el ámbito local, lo que evidencia la importancia de mantener estándares constantes para competir en diferentes frentes.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
LO ÚLTIMO