Uno de los momentos de la infancia de Falcao García es reflejo de su sensibilidad, uno de los rasgos que más caracteriza al futbolista, según le contó Maicol Buitrago a Pulzo.

El amigo del samario contó las razones que llevaron a las lágrimas al entonces adolescente, cuando ambos eran compañeros de colegio:

Buitrago se conoció con Falcao García desde 1996 o 1997, aproximadamente. En esos días, el jugador llegó como un alumno nuevo y pronto encajó entre el resto del grupo.

El periodista afirma que todavía conversa con Camilo García y con el ‘Tigre’, los dos amigos que lo acompañaron entre lágrimas por haber perdido el año escolar en el colegio Nuevo Gimnasio Cristiano en Cota.

“Nunca le agradecí por haber llorado conmigo”, manifiesta el amigo de Falcao, que en la actualidad se desempeña como periodista de una canal televisivo y que no duda en elogiar las cualidades del atleta. “Tiene un corazón muy grande”, afirma.

Buitrago reconoce la dedicación que tiene el futbolista por sus seres queridos y describe al delantero colombiano del Galatasaray como una persona dadivosa, que prefiere pasar desapercibido en las donaciones que hace.

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En esa misma época que lloró por su compañero, Falcao le regaló una gorra conmemorativa del Mundial de Francia en 1998. El samario se la firmó, pues desde esa época le gustaba practicar cómo sería la caligrafía para su nombre.

Lo llamativo es que Buitrago recuerda que ese accesorio, que fue un obsequio como parte de una actividad, era muy costoso. No obstante, advierte que el futbolista siempre buscaba cómo ser generoso.

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“Falcao ha logrado dejar una semilla muy positiva en el deporte”, asegura con orgullo el comunicador acerca de su amigo, que en medio de la lealtad infantil lo acompañó en el llanto.