¿Por qué es importante mantener altas coberturas de vacunación?
La preocupación por las tasas de vacunación responde a una realidad epidemiológica clara: una alta cobertura permite el desarrollo de la denominada inmunidad de rebaño, que protege a toda la comunidad, incluyendo a quienes no pueden ser vacunados por razones médicas, como alergias severas o inmunodeficiencias. Cuando se reduce la proporción de personas vacunadas, vuelven a surgir brotes de enfermedades controladas, como ocurrió recientemente con el sarampión en diversas regiones del mundo.
Mantener coberturas elevadas previene la re-emergencia de epidemias y evita el colapso de los servicios de salud pública, retos especialmente complejos en áreas donde el acceso es limitado. Además, ayuda a reducir la carga económica derivada del tratamiento de enfermedades prevenibles, reforzando el círculo virtuoso de la prevención y el bienestar social.
¿Qué desafíos enfrenta actualmente el Programa Ampliado de Inmunizaciones en Colombia?
El PAI, aunque consolidado como política pública esencial, enfrenta retos variados. Entre ellos destacan las brechas en cobertura entre zonas rurales y urbanas, dificultades logísticas en la distribución de biológicos en regiones apartadas y la influencia de la desinformación sobre la percepción pública de las vacunas. Estos factores dificultan el acceso equitativo y sostenible, un aspecto subrayado por organizaciones internacionales y nacionales como el Ministerio de Salud y la OMS.
Adicionalmente, la integración de nuevas vacunas, como las dirigidas a emergencias sanitarias recientes (por ejemplo, la COVID-19), exige recursos adicionales, capacitación continua del personal y estrategias de comunicación actualizadas. La constante vigilancia epidemiológica y la respuesta rápida ante brotes también forman parte de los nuevos desafíos que demandan inversión y coordinación multisectorial.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO