La publicación compartida por The Royal Society asegura que los investigadores se dieron a la tarea de medir todo el cuerpo de más o menos 9 mil hombres, de los cuales se crearon moldes digitales y se eliminó su rostro.
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Al terminar con este proceso, 800 mujeres empezaron a elegir las zonas que más llamaban su atención y aquellas que preferían dejar de lado.
Después de analizar los datos recopilados, concluyeron que las mujeres se sentían atraídas por los hombres que tenían las piernas largas, las cuales debían medir un poco más de la mitad de su estatura total.
Al finalizar, los científicos terminaron asociando esto con que según la evolución de las especies las piernas largas son un indicador de buena salud, pues son menos propensos a desarrollar enfermedades como la diabetes tipo 2.
“Los resultados se suman a la creciente evidencia de que la variación de las extremidades influye en aspectos del bienestar humano, desde la elección del compañero hasta las perspectivas de empleo“, concluyeron en la publicación.
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