Las loncheras que llevan los niños al colegio siempre dan para discusiones y debates porque los padres siempre quieren lo mejor para sus hijos, pero también es necesario que lo que lleven al colegio lo consuman con gusto y no termine en manos de otro o vuelva a la casa igual. Tal vez, esa era la mentalidad de los papás de los niños que crecieron en los años 80, 90 y hasta parte de la primera década de los 2000.

Eso se refleja en la publicación que hizo en su cuenta de Twitter @linasandoval con una gran cantidad de productos en paquetes, también algunos con bastante dulce, chocolate, crema, grasa, harinas y bebidas que, aparte de refrescar, también se convertían en una fuente de energía extra por el azúcar.

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Esta mujer apeló a la nostalgia para revivir esos recuerdos y sabores, por medio de una ilustración hecha por Eddie White (@EddieWhiteJr). Lo que dio para que el tuit se volviera viral y se compartiera bastante, acompañado de muchas opiniones.

Críticas a la lonchera que llevaban los niños en el pasado por ser productos ultraprocesados

En la imagen se pueden ver productos icónicos, algunos que han desaparecido o se han transformado de ese que muchos conocían y consumían con gusto; papas Margarita y Super Ricas, Chitos, Choclitos, Boliqueso, Gudiz, Galletas Festival, Chokis, Gansito, Chocoramo, Ponqué Gala, Nucita, Alpinito, Gelatina Boggy, Yogo Yogo, Kumis Alpina, Bon Yurt, Jugo Tampico, Pony Malta, Jugo Hit, entre las más recordadas y reconocidas galguerías colombianas de los últimos 30 años.

Además, la imagen tenía otros productos más naturales como frutas, huevo, sánduches, queso, bocadillo, jugos, pero estos en menor medida y cantidad. Dejando clara la dependencia de los empacados, aunque se puede entender con las dinámicas sociales; en ese momento papá y mamá empezaron a trabajar juntos, dejando el filtro de la alimentación para lo que se conseguía en la tienda y no se dañaba al trasportar al colegio.

Pero así como muchos revivieron recuerdos y sabores, también cayeron en cuenta de que hoy no podían darse el lujo de comer esos alimentos con tanta tranquilidad. Los años no pasan solos y comerlos ya no sientan igual al cuerpo. Pues, uno de los que reflexionaron sobre esto fue el periodista, especialista en salud, Ronny Suárez, quien dejó una crítica dura a esa muestra de nostalgia: “Más de 20 productos ultraprocesados en esta imagen. Algo hemos hecho muy mal”.

Y si tenemos en cuenta que en la ilustración hay poco más de 30 elementos, causa un poco de remordimiento que muchos de fueran común denominador en las loncheras de los pequeños que crecieron en aquellas épocas.

Este concepto va de la mano con las campañas de los últimos años se han tomado gran parte del mundo, que en el Gobierno de Gustavo Petro se han materializado con los sellos en los productos que se exceden en componentes, ingredientes y materias primas que son perjudiciales para la salud de los niños.

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Y aunque para muchos puede ser un tema de ‘corrección política’, el mismo Ronny Suárez mantiene su postura de hace un tiempo con lo que muchos creían, incluido él, que alimentaba y ayudaba al crecimiento:. Así lo consignó en un trino del año 2022: “Crecimos pensando que los Kellogg’s eran buen desayuno. Que el Chocoramo, inofensivo. Que la Pony Malta, saludable. No nos contaron sus riesgos. Repitieron que “de algo nos tenemos que morir”. Y por eso cuesta asumir que esos productos enferman”.