La tierna historia fue compartida por el Albergue Pergatuzoo, de Ciudad de México, luego de ver la carta que el pequeño Cristian dejó; en la misiva, el niño les anunciaba que cuando creciera vendría por su mascota; mientras tanto, les pedía cuidarla bien, reporta Seunonoticias.com.

Este es el texto editado de la carta que conmovió a los directivos del refugio de animales y que se puede apreciar en la foto publicada por los cuidadores:

“Te dejo a Simón, es mi perro; no quiero que mi papá le pegue. Llora mucho porque no hay comida, te dejo mis ahorros para sus tortillas. No le peguen porque mi papá le pega mucho. Simón come mucho”, y cierra con la petición anteriormente mencionada: “No se lo lleven. Cuando [yo] crezca vengo por Simón”.

El medio Misiones Online informa que el perro fue dejado en el albergue hace 6 meses, cuando comenzó la pandemia por coronavirus, y ya el cachorro ha crecido considerablemente.

El dueño de Simón no solo dejó la primera carta y las monedas para comprarle galletas a su perro, sino que siguió enviando misivas, como esta, destacada por el portal (editada) y que llevó al refugio la madre del pequeño:

“Simón, te extraño. Me dijeron que te llevaron al veterinario. Te dejo 3 pesos para tortilla”.

Para tranquilidad del menor, el albergue publicó en redes sociales que la mascota no se dará en adopción y que quieren contactar a su dueño para hablar con él, al tiempo que le informan que el canino está bien de salud y sigue creciendo.

Más delante, el niño escribió esta carta (editada), que fue entregada por su hermana al albergue: “Hola, Simón. No puedo verte por el Covid. Mi papá no me deja salir. Te mando tu comida y tres pesos. Mi papá no tiene trabajo. Pórtate bien; te extraño”.

Simón, por su parte, ya dejó de ser un cachorro y ahora se ve así, según estas fotos publicadas en la cuenta de Facebook del Albergue Pergatuzoo, junto con un mensaje que recalca que Simón no está en adopción:

Las personas del albergue no fueron las únicas que se conmovieron por el gran amor de Cristian (el nombre del niño, según información publicada por el refugio) para con su perro.

Los usuarios de Facebook también expresaron sus sentimientos, como se aprecia en este mensaje (sin editar):

“Admiro el valor que le dan a los sentimientos de un niño que tuvo el instinto y el corazón de saber, que aún queriendo a Simón con toda su alma, en ese momento fue mejor entregarlo a ustedes confiando que le darían una mejor calidad de vida y que respetarían el vínculo que él tiene con su mascota. Simón tiene el mejor dueño que pueda existir. Un Niño que desde pequeño está mostrando el verdadero amor, lealtad y compromiso con su mascota. Cosa que muchos adultos deberían de aprender de este Niño. Gracias, gracias a ustedes por formar parte y respetar ese compromiso”.

La usuaria Arroyo Nelis dice, por su parte (sin editar): “Simón que guapo eres, la mejor noticia es que el amigo al que elegiste serle fiel también decidió corresponderte igual.. pese a las circunstancias.. es solo una pausa lo veras. Gracias por el esfuerzo de seguir apoyando a Simón y mantener la promesa e ilusión de un niño”.

Otras personas, como Natt Montoya, opinan que el albergue debería hablar con el niño para hacerle entender que el perro estará mejor cuidado con una familia que lo acoja, mientras que Adriana Reyes señala que el dinero que se gasta en la manutención y cuidado de Simón estaría mejor invertido en más perros que lleguen al albergue, por lo cual también sugiere que se debería dar en adopción a otra familia.