La canadiense Fatemeh Ghodsi, que vive en Vancouver, no podía creer lo que estaba escuchando cuando recibió la llamada de la pareja de buceadores Clayton Helkenberg y su esposa Heather para decirle que habían recuperado su iPhone 11, publica el canal CBC.

La mujer le dijo a ese mismo medio que en un primer momento pensó que algún amigo le estaba haciendo una broma, pues le parecía imposible que su celular estuviera funcional después de pasar casi 6 meses en el fondo del agua.

Sin embargo, los Helkenberg la convencieron y le demostraron que era verdad, por lo que Ghodsi emprendió un viaje a Chilliwack para recuperar el iPhone.

La propietaria, contó, dejó caer el teléfono en el agua en septiembre de 2020, cuando estaba de paseo y quiso subirse en un bote ‘chocador’ en el parque acuático del lago. Las fotos recuperadas del celular muestran que estaba sonriendo antes del percance.

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Ghodsi regresó a Vancouver “en llanto”, ya que el personal del centro de recreación le informó que sería imposible recuperar el dispositivo. “Estaba en una situación en la que perdí el equilibrio y lo dejé caer al agua. Angustiada y llorando, regrese a Vancouver”, expresó la canadiense a CBC.

Por su parte, Clayton Helkenberg relató a ese canal que tiene un canal de YouTube en el que publica los “tesoros” que encuentra con su esposa en el fondo de los lagos que visitan, principalmente para limpiarlos de basura.

“Me lo llevé a casa, limpié la suciedad y se encendió enseguida, así que fue bastante sorprendente”, recordó Clayton y agregó que sacó la tarjeta SIM, la insertó en otro celular para averiguar el número de la dueña y consiguió ponerse en contacto con Ghodsi.

Para empezar, estaba en completo ‘shock’. Fue como si un teléfono zombi volviera a mí, porque me había resignado a su desaparición”, finalizó Fatemeh Ghodsi, después de explicar que el aparato está funcional, a pesar del micrófono roto y ciertos problemas con el altavoz.