La información publicada en redes sociales por parte de la familia del fiscal paraguayo Marcelo Pecci fue fundamental para que los delincuentes ubicaran el lugar donde estaba pasando sus vacaciones para asesinarlo.

Por esta razón, el intendente de la dirección de Investigación Criminal, Dijín-Interpol, Hárold Gomajoa, con injerencia en la Policía Quindío, entregó las recomendaciones a la ciudadanía para que evite ser perfilada por los delincuentes.

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La primera recomendación es abstenerse de publicar las ubicaciones en tiempo real. “Lastimosamente, las personas publican sus actividades en sus estados: ‘viajé a tal lugar’, ‘nuevos rumbos’, inclusive, postean la ubicación del hospital donde van si están enfermos, y lo que no ven es el trasfondo de esas publicaciones”.

Según el funcionario, con estas publicaciones en redes se está avisando al criminal para que sepa que, por ejemplo, la vivienda, finca o apartamento está solo. Es decir, como dice el refrán popular, la oportunidad hace al ladrón.

“A las personas les gusta publicar muchas fotografías de los bienes que van consiguiendo: casas, carros, motocicletas, les gusta que las admiren, pero muchas veces cometen el error de publicar las placas del vehículo, y con eso están entregando varios mensajes: que su poder adquisitivo importante, de alguna manera le están diciendo al delincuente que lo puede extorsionar, secuestrar, robar, y le está indicando cuál es el carro en el que se moviliza”, explicó Gomajoa.

El intendente también señaló que las personas son muy confiadas por redes sociales y el delincuente se aprovecha de eso.

“Hay otro aspecto muy importante: la ciber-extorsión, el ‘sexting’ como flagelos, porque si alguien está de vacaciones y publica las fotos en vestido de baño de su pareja, hijos y familiares o de él mismo, estas fotografías pueden ser manipuladas para crear un contexto delictivo”, manifestó el uniformado.

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Y añadió: “Los niños también son usados por los delincuentes con las fotografías, hacen fotomontajes de las víctimas, en los últimos años se observa un aumento preocupante de esta modalidad porque toman la mitad de la imagen, para distorsionarla y así manipular a sus víctimas”.

El investigador judicial, experto en nuevas tecnologías y política criminal, aconsejó a la ciudadanía para que sea cuidadosa con sus publicaciones: “Pensar para qué se publica una fotografía y con qué fin, dejando a un lado egos y orgullos, hay que reflexionar un momento sobre para qué es necesario que mis contactos de redes sociales sepan dónde estoy. Muy importante también es evitar agregar a todas personas que envíen invitaciones amistad”.