Esta es una historia desconocida para muchos: hubo un tiempo, sí, en el que en Luisiana fue española, en el que habitaron españoles y criollos y se habló español, hasta que Carlos IV la vendió a los franceses a cambio de un territorio en Italia.

La novela que hoy reseñamos, “Lejos de Luisiana” (Planeta 2022), merecida ganadora del Premio Planeta 2022, se divide en cuatro partes y se desarrolla a lo largo de cuatro décadas, desde que Francia cede a España parte de las tierras del Misisipi en 1763, hasta que Estados Unidos compra Luisiana en abril de 1803 y Francia abandona Nueva Orleans en diciembre del mismo año.

Lector/a que tenga la expectativa de encontrarse únicamente con la historia que une a España con Estados Unidos, debe mejor leer “Las Hijas del Capitán” de María Dueñas, pues hay más lazos hacia 1930 que en el siglo XVIII. En el libro de Luz Gabás, la presencia de españoles se unirá a la de los franceses en su lucha común contra los ingleses en Norteamérica, pero irá mucho más allá.

Los acontecimientos que suceden a lo largo de esos cuarenta años y que se recrean en la novela, transformarán no solamente las circunstancias de los personajes del libro sino que transformarán el mundo: la guerra de los europeos contra los indígenas y su cultura, las rebeliones de los franceses contra los españoles, el surgimiento de los territorios cimarrones, el inicio de la emancipación de los esclavos y, por supuesto, la guerra de los norteamericanos contra los ingleses por la independencia de su país.

Los sucesos en América no son los únicos recreados, pues la autora los ata a los de Europa; mientras tanto, triunfan las ideas revolucionarias que harán caer el Antiguo Régimen y que alterarán el curso de los acontecimientos políticos y sociales. Suzette, la protagonista femenina, conocerá no solo Nueva Orleans, su lugar de nacimiento, sino La Habana (Cuba), México, Madrid y Aranjuez en España y en cada uno de esos sitios, Gabás aprovechará para darnos el nutrido contexto histórico que tiene la novela.

“Lejos de Luisiana” nos relata una de las más bellas epopeyas en prosa, entendida ésta como una composición literaria en que se cuentan las hazañas legendarias de personajes heroicos, que generalmente forman parte del origen de una estirpe o de un pueblo, del mundo “moderno”, la del pueblo kaskaskia. Pero también es una novela histórica en la que abundan datos y hechos que, gracias a la autora, por fin conocemos por haber estado ocultos, a lo mejor intencionalmente, durante décadas. También puede ser una novela de aventuras, porque las relatadas no le envidian nada a las de Verne, Dumas o Stevenson.

Finalmente, también es una de las más hermosas historias de amor, en mi concepto, destinada a convertirse en una de las clásicas de la literatura en lengua española. La historia de amor entre Ishcate y Suzette, un amor difícil y prohibido, de esos que suceden muy pocas veces en la vida y en la literatura, tan de desenlaces fáciles hoy en día.
Ishcate, hijo del jefe Couraway, es un joven indio de la tribu kaskaskia, uno de los muchos pueblos de los Illinois que vivían en la Alta Luisiana a mediados del siglo XVIII. En el primer capítulo del libro, nos encontramos con un ritual de iniciación en dónde los varones de 14 años deberán pasar la noche en el bosque, solos y con los ojos vendados. Sin que el joven Ishcate lo sepa, su padre habrá permanecido todo el tiempo con él para protegerlo durante una larga noche en la que el chico experimenta el miedo, las dudas y el desasosiego, con la imaginación que crea fantasmas y bestias y en la que, finalmente, gracias a su valentía y a la conexión que logra con la naturaleza al invocar a sus ancestros y dioses, logra salir sano y salvo del bosque. El consejo que le da su padre servirá de hilo para la historia que se avecina: “No pidas una vida fácil, hijo; pide fuerzas para soportar una vida difícil”.

Suzette Girard, es la hija de Blanche y Jérôme, colonos franceses asentados y que se ven forzados a aceptar la controvertida decisión de su país, Francia, de ceder a España en 1763 parte de las tierras que rodean el río Misisipi. Gerard se ha asociado con Leroux, otro colono francés que vive con su pareja Cecilia, quien ha sido abandonada junto con su hijo por su esposo francés, pero no se encuentra legalmente divorciada, a pesar de lo cual tiene tres hijos con Leroux, todo un ejemplo de desafío social. Ambos, Girard y Leroux, han obtenido de Francia la concesión comercial exclusiva para la explotación económica de las mercancías transadas con los indígenas y harán todo lo posible para conservarla durante el periodo de dominio español. Ambas familias tendrán el mismo objetivo: ganar dinero, aumentar su reputación y su posición en la escala social y contribuir al crecimiento de Nueva Orleans, en el caso de Girard, y de la nueva ciudad, Saint Louis, en el caso de Leroux.

Suzette e Ishcate se conocerán siendo ella muy niña cuando el indio Sarazen llevará a su casa a un Ishcate herido y moribundo y ella, en compañía de su esclava Anne, le prodigarán todos los cuidados necesarios para que se recupere y entablarán una intensa amistad. Tanto Ishcate como Sarazen pertenecen al mundo indígena en tanto Suzette y Anne pertenecen a un mundo completamente diferente: los indios y los negros tienen un mundo inferior y menos valioso que el de los colonos europeos.

Los Girard, por supuesto, querrán que sus hijas Margaux y Suzette se casen con españoles, los nuevos amos de Luisiana. En el caso de Suzette será con el español Sebastián Orlac, de quien pronto quedará viuda. Y en el caso de Margaux la boda será con Tomás Durán. Que no se nos olvide que en aquella época las alianzas matrimoniales se correspondían con intereses políticos, económicos y familiares, dejando como última prioridad el amor.

Suzette e Ishcate se encontrarán en su adolescencia y darán comienzo a una épica historia de amor prohibido e intentarán preservar su amor de las amenazas del mundo que les ha tocado vivir. Un segundo forzado matrimonio de Suzette con otro español, que nos dejará en evidencia los pocos derechos legales, económicos y de movilidad que tenían las mujeres, será un obstáculo aún peor para ese amor.
A lo largo de los años, la historia de amor de Suzette Girard e Ishcate irá tomando fuerza en Lejos de Luisiana, hasta un final a la altura, por supuesto, de todas las dificultades, angustias y dramas que han tenido que vivir no solo los protagonistas sino los personajes secundarios cuyas historias nos hacen también conmover profundamente.

Siempre será difícil mantener un equilibrio entre lo histórico, lo romántico, lo político y lo personal. Y aunque el libro es bastante extenso, logra que quien lo lee navegue por un río a través del cual puede recorrer no solo espacio y tiempo sino tempestades, lagos y ensenadas, toda una geografía cuyo símil será la vida.

Un libro que mereció de mi parte una relectura, algo que pocas veces hago, la requiere para dimensionar el simbolismo y la dimensión de los hechos relatados. Se le agradece a la autora que al final del libro nos identifique personajes y hechos reales y ficcionales, lo que aumenta la necesidad de una deliciosa relectura.

Luz Gabás (Monzón, 1968) es licenciada en filología inglesa, investigadora literaria y lingüística, traductora, y profesora universitaria, y es autora de Palmeras en la nieve (2012), obra de éxito, traducida a varias lenguas y cuya adaptación cinematográfica podemos encontrar en Netflix, y que será un abrebocas perfecto para este relato. Desde el año 2007 reside en Anciles, junto a la villa de Benasque, de la que fue alcaldesa entre 2011 y 2015. Ha publicado Regreso a tu pie (2014) Como fuego en el hielo (2017), y El latido de la tierra (2019).