Las mejores peleas se dan en silencio. Por debajo del radar. Pocos están hablando sobre el agarrón entre Apple y Facebook que comienza a tener ribetes (siempre quise usar esa palabra) estratosféricos. 

Resulta que Apple lleva años diciendo que ellos son los abanderados de la protección de la privacidad de sus usuarios. Entre líneas, le ha enviado varios ‘viajados’ a Facebook que, como todos sabemos, hace sus billones a punta de almacenar, analizar y vender los datos personales de sus usuarios.

De hecho, si ven con atención los recientes comerciales que ha sacado Apple, hacen un énfasis especial en la privacidad de las personas. Son muy buenos, hay que decirlo. Se burlan deliberadamente de cómo empresas como Google o Facebook conocen hasta nuestros problemas más íntimos de salud.

Resulta que el tema pasó de los comerciales y los dardos en los medios estadounidenses a la confrontación total y al aburrido mundo legal y regulatorio. Todo apunta a que Facebook está preparando una demanda gigante contra Apple por cuenta de un nuevo sistema que tendrá el sistema operativo.

Los expertos en tecnología han anticipado que Apple implementará en todos sus iPhones un sistema antiseguimiento. Y esto, déjenme contarles, sería una bomba nuclear. Para ponerle en palabras sencillas: los usuarios de Apple recibirían la notificación cada aplicación que descargan pidiendo permiso para acceder a sus datos personales.

Pero ¿por qué esto sería un cambio monumental? Básicamente los usuarios de los iPhone tendrán la posibilidad de ver cuáles aplicaciones solicitaron permiso para hacer un seguimiento de sus datos y decidir si quieren dárselos o no. 

Actualmente, somos nosotros los usuarios los que tenemos que decirle a cada aplicación “oiga, mire acá están mis datos, pero no los puede usar”, cada vez que no aceptamos esos famosos Términos y Condiciones. El problema es que no leemos y aceptamos sin mayor razonamiento. Acá el experto Hugo Saez explica en detalle este terremoto.

El argumento de Facebook para evitar que el sistema antiseguimiento vea la luz es que millones de empresas, sobre todo las pequeñas y medianas, perderían billones de dólares. ¿Por qué? Pues según Facebook, ellos utilizan los datos que recolectan de los usuarios, no para vigilar ¡no!, sino para darle mejor data a los negocios y que puedan incrementar sus ventas.

Desde hace al menos cinco años, los datos personales de los usuarios son más preciados que el petróleo (otra cosa que siempre quise decir). Las empresas, así quieran venderse como carmelitas descalzas, pelean por sacar el mayor provecho de cada dato que saque de nosotros. En eso, Apple y Facebook se parecen. El tema es que se viene una tormenta legal que no se sabe en qué puede terminar.

Como dicen en el barrio, “no hay puñalada mala en esta pelea”. Cada uno defiende sus intereses y lo que hay son recursos para fondear una guerra de mil días. Lo cierto es que los gigantes de la tecnología no van a parar hasta convertirse en dragones indestructibles a fuerza de nuestra privacidad. 

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*Las opiniones expresadas en este texto son responsabilidad exclusiva de su autor y no representan para nada la posición editorial de Pulzo.