El anuncio lo hizo la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OACP), que difundió este domingo una carta firmada por el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Luis José Rueda, que señala que ese organismo está “presto a colaborar en aquello que se requiera para consolidar este proceso tan anhelado en bien de nuestro país”.

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“La Conferencia Episcopal recibe con gratitud y responsabilidad la invitación a participar en su condición de acompañante permanente en la Mesa de Diálogos a través de la representación del ilustre monseñor Héctor Fabio Henao (que ocupa el Secretariado Nacional de Pastoral Social)”, agrega la carta.

También fueron designados los arzobispos de Popayán, Ómar Alberto Sánchez Cubillos, y de Cali, Darío de Jesús Monsalve Mejía, para estar “atentos de manera más inmediata para apoyar estos procesos de la mesa de diálogos”.

“La Iglesia expresa a las partes los mejores deseos para que buscando con ahínco los caminos necesarios se recorran con compromiso en la búsqueda de la paz”, añadió el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia.

Los diálogos con el Eln tienen como países garantes a Venezuela, Cuba y Noruega, y las partes invitaron el mes pasado a Chile, Brasil y México para que se sumen en esa condición, y a Estados Unidos, Alemania, Suecia, Suiza y España como acompañantes, así como al secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

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En el marco del proceso de “paz total” que ha impulsado el Gobierno del presidente Gustavo Petro, lo más celebrado ha sido la vuelta de las negociaciones con el Eln que estaban interrumpidas desde hace cuatro años, cuando esa guerrilla perpetró un ataque terrorista contra la Escuela de Cadetes de Policía General Santander, en el que mató a 22 jóvenes estudiantes.

Como parte de esa política, Petro también busca algún acuerdo o sometimiento a la Justicia de otros grupos armados ilegales, como las disidencias de las Farc y bandas criminales.

El anuncio sobre la participación de la Iglesia católica se conoció poco antes de que el Gobierno y el Eln concluyan este lunes la primera ronda de negociaciones de paz, que comenzaron en Caracas el pasado 21 de noviembre con la “esperanza” de ambas delegaciones de concretar pronto acuerdos sobre “asuntos básicos y urgentes”, para dar paso más tarde a otros “más estructurales”.

En la primera semana de esta fase, las partes informaron del acuerdo de “adelantar acciones diplomáticas con el Gobierno de Estados Unidos para conocer su disposición a participar en este proceso mediante un enviado especial a la mesa de diálogo”.

Durante los primeros días, el Gobierno colombiano acordó incluir en su equipo negociador a cuatro mujeres, con lo que la delegación quedó establecida con paridad de género. Las nuevas negociadoras son la política Nigeria Rentería, las periodistas Mábel Lara y María Jimena Duzán, y la teóloga Adelaida Jiménez, según informó la Oficina del Alto Comisionado para la Paz a los cuatro días de arrancar la primera ronda.

Las negociaciones estaban congeladas desde 2018 por orden del entonces presidente de Colombia, Iván Duque, relevado al frente del Ejecutivo el pasado agosto por Gustavo Petro, quien decidió retomar el diálogo nada más alzarse con la victoria en las elecciones presidenciales.

Se espera que, al término de la jornada, se den a conocer los avances de esta primera ronda, así como la fecha y lugar en que comenzará la segunda.

Por otra parte, el secretario general de la ONU aceptó la invitación del Gobierno colombiano y la guerrilla en una carta que también fue publicada por la OACP el viernes.

En la misiva, el secretario general de la ONU felicita a las partes “por haber llegado a esta primera etapa esencial” de reanudar los diálogos en Caracas en noviembre pasado y expresa el firme apoyo de Naciones Unidas “para acompañar a las partes en la búsqueda de la paz que tanto anhela el pueblo colombiano”.