El guardabosques Sergio Cruz tuvo la oportunidad de interactuar con animal que se consideraba extinto en Colombia. El hermoso momento ocurrió en una reserva natural del Quindío, Cruz pudo observar un animal que solo se ha dejado ver en 17 ocasiones del ojo humano.

“Estaba realizando estudios en la Reserva, cuando alrededor de las 2 de la tarde a 3430 metros de altura vi a este mamífero por el sendero alimentándose de bambú y pasto”, relató Cruz, guardabosques de la Fundación Proaves Colombia.

(Lea también: Condenaron a hombre que tenía a 44 perros viviendo en una pocilga en Bogotá)

El animal que se encontró Cruz es un Toro de los Chusques Colombiano, roedor que fue descubierto en 1879 y que los científicos colombianos consideraban extinto.

“Poco a poco me acerqué más y más. No mostró absolutamente ninguna preocupación por mí y, a pesar de su gran tamaño y de ser un animal salvaje, me dejó tomar una foto hasta que se acercó a mí y se me subió encima. ¡No pude imaginar mi sorpresa y alegría!”, detalló el guardabosques.

En video quedó registrado el momento en el que el roedor se alimentaba del pastito y de las hojas de bambú que habían caído sobre el suelo de la reserva Loro Coroniazul (Génova, Quindío). De repente acercó sus bigotes a la cámara para al hombre que lo grababa.

El Toro de los Chusques fue descubierto hacia 1879 y, después de 150 años, solo se ha dejado ver en 17 ocasiones por los seres humanos. El último encuentro se había registrado en la frontera entre Colombia y Ecuador.

(Vea también: ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? La ciencia respondió esta gran pregunta)

El roedor tiene pelo rojizo brillante. Se caracteriza por su cola larga con punta blanquecina. Sus comportamientos son casi desconocidos para el ser humano. Se presume que es endémico de Colombia: la mayoría de sus avistamientos ocurrieron en Bogotá.

Esta especie es tan rara que los expertos no están seguros de cuán amenazada está, pero su afición por los matorrales de bambú dentro del bosque nuboso altoandino, un hábitat único en gran riesgo por la tala para la agricultura y el cambio climático, significa que este mamífero está ciertamente en peligro de extinción”, detalló la Fundación Proaves.

La Fundación que redescubrió al Toro de los Chusques aseguró que ahora planea estudiar la especie para evaluar la población y comprender qué acciones se pueden adelantar para salvarlos de la extinción.