“La primera línea del Metro irá en la mitad de su construcción, esta prevé un plazo de fusión de 8 años. Así que para cuando yo me vaya debemos ir en la mitad de la primera línea del Metro”, confirmó con sinceridad López en la entrevista con La W.

Esto, pese a que el exalcalde Enrique Peñalosa, quien entregó la administración a López, en diciembre aseguró a Caracol Radio que ya había quedado contratado el Metro de Bogotá y que “en 4 o 5 años va a estar operando, eso es la realidad”.

Sin embargo, para la alcaldesa la realidad es otra, ya que se trata de una megaobra de la que apenas están los estudios y la licitación.

“Nada es fácil en esta vida, pero toca con paciencia tratar de sacarlo adelante y de manera transparente para mejorarle la vida a los ciudadanos”, añadió la mandataria.

 

No obstante, López se comprometió en la emisora con otras 4 gestiones de movilidad y seguridad para cuando termine su administración.

“Es muy posible que el Regiotram de Occidente, el metro ligero que vendrá de Facatativá, Funza, Mosquera y cruzará Fontibón hasta conectarse a la primera línea del Metro, ya esté andando. Espero que cuando yo me vaya, en diciembre del 2023, ya los ciudadanos se puedan montar en el Regiotram, lo puedan usar para llegar, no en 2 horas desde ‘Faca’ hasta el centro de Bogotá, sino en 48 minutos”, agregó.

Sobre el tren de cercanías del Norte aseguró que para ese tiempo “debe estar en construcción. No creo que nos alcancemos a montar, pero sí va estar en construcción”.

También se refirió a Transmilenio y al SITP. Prometió que estos servicios de transporte público “habrán renovado su flota por una limpia, que no contamine y que llegue de manera más eficaz a los barrios con horarios determinados”.

Finalmente, la alcaldesa dijo en la entrevista: “Bogotá tendrá la mejor red de andenes y ciclorutas de todo el planeta tierra de un país en desarrollo. Los hurtos contra bicicletas y la inseguridad para el uso de la bicicleta habrán bajado notoriamente”.

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