El pasado jueves, los habitantes de Necoclí (Antioquia) bloquearon la vía nacional que conecta a Urabá con el departamento de Córdoba, en señal de protesta a los intentos de la administración municipal de privatizar el servicio de agua y alcantarillado en esa población.

Desde tempranas horas de la mañana, los manifestantes bloquearon el paso de vehículos en dos puntos de la vía nacional, que conecta a Necoclí con los municipios de Turbo y Arboletes.

De acuerdo con fuentes consultadas por Confidencial Colombia, el malestar de la ciudadanía se origina por el Proyecto de Acuerdo 007, que radicó el alcalde Jorge Tobón Castro, a principios de marzo en el Concejo Municipal. Allí solicita autorización para entregar en concesión por 25 años a un operador privado la administración y operación de la empresa de acueducto y alcantarillado.

Proyecto de Acuerdo 007-202… by Confidencial Colombia

En el documento oficial, radicado por el alcalde Tobón, se justifica la privatización de la empresa que actualmente es propiedad del municipio, aduciendo que “está trabajando a pérdidas”, razón que le impediría prestar un servicio de buena calidad.

No obstante, los opositores a la privatización del servicio de acueducto no dan crédito a la versión de la administración y temen que al entregarse la empresa a un privado no solo se empeore la calidad del servicio, sino que se comprometan los recursos de municipio.

“La anterior administración restituyó al municipio la operación del acueducto y alcantarillado, y el actual alcalde mediante autorización del Concejo creó las empresas descentralizadas de orden municipal de servicios públicos de acueducto y alcantarillado, las cuales, en un año y tres meses, están solicitando suprimir para entregarla a un operador privado que desconocemos”, señala un comunicado de la Veeduría, que se opone la privatización del agua en Necoclí.

Los manifestantes han insistido en que mantendrán el bloqueo en la vía nacional hasta tanto el Concejo de Necoclí tumbe o rechace la solicitud del alcalde Jorge Tobón de privatizar la empresa de acueducto, o entreguen su operación a Empresas Públicas de Medellín (EPM).