El ‘Times’ reporta que sin importar qué tanto el pueblo paisa quiera olvidar ese capítulo de su historia, series como ‘Narcos’, de Netflix, no ayudan mucho a que “la ropa sucia se lave en casa”, como reporta el autor del artículo.

Tampoco ayudan a olvidar los años oscuros de Medellín los ‘narcotures’ por la Hacienda Nápoles y el edificio Mónaco, ni la exposición mediática de personajes como Jhon Jairo Velásquez, ‘Popeye’, que le saca beneficio monetario al hecho de haber sido uno de los asesinos de confianza de Pablo Escobar y se ufana de ello.

“Es como si los miembros de Al Qaeda ofrecieran paseos turísticos por Nueva York contando cómo planearon los ataques del 11 de septiembre de 2001”, dice Luis Fernando Mejía, representante de los vecinos del edificio Mónaco, en Medellín, citado por The New York Times.

El artículo también se refiere a la orden de la alcaldía de la ciudad de derrumbar el mencionado edificio Mónaco y al rechazo de la sociedad en general sobre el bombo que aún genera el sanguinario narcotraficante.

Tumba de Pablo Escobar

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“¿Por qué decidí destruir el Mónaco? Para mostrar que la ciudad renació y que la ley triunfó sobre el caos”, dice el alcalde Federico Gutiérrez, citado por el diario neoyorquino, y agrega que otra de las causas para demoler ese “edificio maldito” es porque la ciudadanía está cansada de repetir la misma historia una y otra vez.