De acuerdo con el informe de las autoridades, Zachary, de 18 años, fue al colegio para “reflexionar sobre el tiroteo”, uno de los más graves en la historia reciente de Estados Unidos y que desató una cadena de manifestaciones de jóvenes que exigen un mayor control a la compra de armas de fuego.

Las directivas del colegio ya le habían indicado al joven que se mantuviera lejos de la institución, pero aun así Cruz logró entrar al lugar. Según Robert Runcie, superintendente de los colegios de Broward, Zachary no había violado la seguridad, sino que entró por una puerta que vio abierta. “Es algo extraño y entiendo que eso asuste a la gente”, dijo citado por ABC.

Según The New York Times, el joven fue arrestado con una fianza de 25 dólares (cerca de 75 mil pesos colombianos) y estuvo en la misma celda del condado de Broward en la que su hermano estuvo luego de que las autoridades lo arrestaron después de ejecutar el mortal ataque.

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Al igual que su hermano, Zachary fue adoptado, y días después de la masacre aseguró que él, junto con algunos amigos, molestaban en exceso a Nikolas, conducta por la que se mostró arrepentido. Además, lamentó no haber sido un mejor hermano, y por eso dice que de alguna manera se siente culpable por lo que pasó.