Frank Martínez conmovió a jueces y participantes del concurso de cocina cuando en una prueba relacionada con elaborar un plato típico familiar relató difíciles situaciones de su infancia.

Entre los elementos de su preparación, el cómico presentó un pocillo con huevo ante el juez Jorge Rausch, frente al que entró en llanto.

“Este es un homenaje a mi mamá, porque le han tocado unas… Muchas veces nos tocó a punta de huevo”, narró inicialmente.

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Y agregó que la caridad de los demás ayudó en ocasiones a su familia: “Muchas veces, amigos de la familia nos mercaban y mi mamá con lo poquito que tenía hacía eso, que para mí era la locura”.

Sin embargo, destacó que su madre lograba deleitarle el paladar con lo que podía.

“Gracias a los amigos, teníamos comida. Y gracias a mi mamá, no comíamos mal”, mencionó.

Este capítulo de Mastercheftambién tuvo otra cruda historia, la de la actriz Carla Giraldo, que se quebró con sus propios recuerdos, pues dijo que era adoptada y que después la abandonaron.