Cementos Argos tendrá que pagar una multa de 73.771 millones de pesos; Cemex Colombia, también 73.771 millones de pesos, y Holcim Colombia, 54.074 millones de pesos.

Estas tres grandes cementeras representan el 96% del mercado colombiano y establecieron un acuerdo en la modalidad de “paralelismo consciente” para la fijación de los precios exfábrica del cemento gris Pórtland Tipo 1 en el mercado nacional entre enero de 2010 y diciembre de 2012, explica la SIC en un comunicado.

Pero la decisión de la SIC también involucra a seis personas naturales vinculadas con esas mismas empresas.

Se trata de Jorge Mario Velásquez Jaramillo, presidente y representante legal de Cementos Argos (con 342 millones de pesos), Íngrid Restrepo Libreros, gerente de negocio masivo de esa firma (con 84 millones de pesos), y Adriana María Rodríguez Uribe, directora de información comercial de la empresa (con 24 millones de pesos).

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También a Carlos Jacks Echavarría, presidente y representante legal de Cemex Colombia (con 272 millones de pesos), y a Miguel Ángel Rubalcavba Méndez, presidente ejecutivo y representante legal de Holcim Colombia (con 109 millones de pesos) y Jaime Antonio Hill Tinoco, presidente ejecutivo y miembro de la junta directiva de la misma empresa (con 354 millones de pesos).

En su investigación, la SIC encontró que los precios exfábrica del cemento gris Pórtland Tipo 1 de Argos, Cemex y Holcim en el mercado nacional tuvieron un acentuado comportamiento paralelo (paralelismo de precios) entre enero de 2010 y diciembre de 2012, y las tres cementeras no ofrecieron “una explicación económicamente razonable ni verídica que justificara el paralelismo de precios, ni la manera como se fijan los precios al interior de dichas empresas”.

Advirtió, además, que las características y la estructura del mercado del cemento en Colombia lo convierten en un escenario “altamente propenso a la colusión o cartelización empresarial, de acuerdo con los marcadores propuestos por la doctrina económica más utilizada por las autoridades de protección de la libre competencia económica en el mundo”.

En ese contexto, asegura la SIC, Argos, Cemex y Holcim mantuvieron un “ambiente colaborativo, no competitivo, de colegaje o de amiguismo empresarial”, durante el período investigado, que la entidad cataloga de “extraño a un mercado en competencia” y que deja en evidencia que se abstuvieron, “de manera consciente y coordinada, de competir efectivamente, tal y como se advierte en diferentes documentos, correos electrónicos, comunicaciones internas, entre otras evidencias materiales probatorias”.

De otro lado, la SIC informó que archivó la investigación a favor de las empresas Tequendama y San Marcos “por no encontrar evidencia de su participación en el cartel empresarial de fijación de precios”. También archivó la investigación a favor de Argos, Cemex, Holcim, Tequendama y San Marcos por las demás conductas presuntamente anticompetitivas que investigó.

Holcim se manifiesta

En un comunicado que envió Holcim Colombia a los medios, esa cementera manifiesta que no comparte esta primera decisión, pues, asegura, “la compañía entregó de forma oportuna pruebas contundentes que demuestran que estas conductas anticompetitivas nunca existieron”.

También reitera que no ha incurrido “en actividad o práctica corporativa alguna que pudiese ser cuestionada desde el punto de vista legal o ético”, y agrega que es una compañía que “se apega a las regulaciones y marcos legales que aplican en los países donde opera, y además cuenta con un completo y maduro programa de cumplimiento de las normas de libre competencia, actuando bajo los más altos estándares de conducta empresarial y principios éticos corporativos, que la han convertido en un referente a nivel global”.

 Anuncia que interpondrá los recursos administrativos y acciones judiciales a que tiene derecho, “considerando que en esta primera decisión, no hay un solo elemento que permita afirmar y demostrar que ha incurrido en alguna práctica anticompetitiva”.