La decisión la tomó la Junta Directiva, luego de que la inflación anual en diciembre quedó fijada en el 4,09 %, y que todos los grandes componentes del Índice de Precios al Consumidor (IPC) registraran variaciones anuales algo mayores que las proyectadas, excepto el grupo de alimentos, detalló el Banco de la República en un comunicado.

Además, tomó en cuenta que las expectativas de inflación registraron cambios leves, ya que las de los analistas para diciembre de 2018 y 2019 se sitúan en promedio en el 3,47 % y el 3,33 %, respectivamente.

En este sentido, agregaron que esperan que la inflación y las medidas de inflación básica se reduzcan en los próximos meses, en parte por la disipación de los efectos del aumento de los impuestos indirectos que se produjo el año pasado.

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También se consideró que la demanda externa se sigue recuperando, impulsada tanto por las economías desarrolladas como por las emergentes.

Incluyeron en esa valoración que el dólar se ha depreciado frente a la mayoría de monedas y las primas de riesgo de la región, incluida la de Colombia, se han reducido.

En ese mismo campo, la Junta Directiva del Banco de la República consideró que los precios del petróleo se incrementaron nuevamente y se sitúan en niveles superiores a los promedios registrados en los últimos dos años.

“Si esta tendencia se mantiene, los términos de intercambio seguirían mejorando y, junto con la mayor dinámica esperada de la demanda externa continuarían favoreciendo la recuperación de los ingresos externos del país”, subrayó el emisor.

Igualmente, analizó que debido a los mayores ingresos externos, el equipo técnico redujo su estimación del déficit de cuenta corriente de 3,7 % a 3,5 % del PIB en 2017, y pronosticó, adicionalmente, que éste continuará reduciéndose a 3,3 % en 2018.

Pero, ¿a quiénes afecta la subida o bajada de las tasas de interés?

Según el Emisor, cuando la tasa de interés se sube los demandantes desean comprar menos, es decir, acuden a menos recursos en préstamo a los intermediarios financieros. Los oferentes, por su parte, intentan colocar más recursos (en cuentas de ahorros, CDT, etc.).

Pero si la tasa baja, los demandantes del mercado financiero solicitan más créditos, y los oferentes retiran sus ahorros.